En Paraná transcurre una jornada gélida con temperaturas de cero grados. En este marco, Elonce rescató el testimonio de Luis, que pese al frío desempeña su labor diaria al aire libre. El trabajador tiene un puesto de tortas asada en el Acceso Norte y contó cómo se trabaja en pleno invierno.
Luis todos los días se levanta a las cinco de la mañana y va hasta el Acceso Norte con todas sus cosas para comenzar con la venta de torta asada. “Trabajo mucho a pesar del frío, gracias a Dios tenemos salud y eso es lo importante”, dijo al sostener lo que lo motiva “son las ganas de progresar”.
En este sentido, relató que todas las noches prepara la masa para al otro día poder agilizar el trabajo. Acto seguido, sostuvo que cuando comienza a preparar la torta asada no siente tanto frío, “el fuego calienta un poco, el tema son los pies”, amplió y agregó que tiene muchos clientes,: “la mayoría son de la Escuela de Policía y la Quilmes”, comentó.
Al ser consultado sobre la torta asada, destacó que “son muy ricas, están hechas con leche agua, manteca y cuando se enfría no queda dura. Cuesta 1.700 pesos la común y 1.800 pesos la con chicharrón. Los sábados hacemos una torta con jamón y queso, esa cuesta 3.000 pesos”.
Luis resaltó que lo positivo de ir al puesto tan temprano es que vende unas 60 tortas durante la mañana, “a veces para las nueve ya vendí todo”, expresó.
“Hace cuatro años que estoy con el puesto, hay cosas que hay que saberlas hacer, en mi caso peso todos los ingredientes y salen todas iguales”, sumó. Además, amplió que también ofrece “choritorta, algo que eligen los camioneros”.
“El frío no es fácil, pero quiero progresar”, dijo
