

REDACCIÓN ELONCE
La ciudad de Paraná atraviesa una grave crisis de agua potable, afectando a miles de vecinos que padecen la falta de suministro, baja presión y cortes intermitentes, que se han vuelto una constante en los últimos meses. La situación es especialmente preocupante en varios barrios de la ciudad, donde la falta genera angustia y malestar.
Las zonas más afectadas son el Este, Noroeste y Sureste de Paraná. Una falla técnica en la Planta Echeverría ha reducido el suministro a los centros de distribución de Parque del Lago y Lola Mora. En Bajada Grande, el problema persiste desde noviembre, mientras que los vecinos de San Agustín enfrentan cortes nocturnos casi a diario. La falta de agua también es constante en barrios como Balbi, Mosconi III y en las 199 viviendas del Sindicato de Empleados de Comercio, además de ser reportada en zonas como el centro, Paraná V, Hipódromo y Santa Lucía.
Ante esta situación, la única solución disponible hasta el momento han sido los camiones cisterna, que abastecen de agua a los vecinos afectados, aunque de manera insuficiente.
Los motivos de la crisis son diversos. Entre ellos se encuentran un motor fuera de servicio en la Planta Echeverría, una red de tuberías obsoleta y mal mantenida, el aumento en la demanda de agua y obras inconclusas. Además, un proyecto financiado por el ENOHSA ha sufrido retrasos, lo que ha complicado aún más la situación.
El municipio avanza en la construcción de una nueva tubería clave desde la Planta Echeverría hasta el Centro de Distribución Lola Mora, con un 93% de avance. También está prevista para marzo la construcción de un nuevo ducto hacia la planta Ramírez, lo que ayudará a aliviar la crisis en el sector este de la ciudad.
Mientras tanto, los vecinos deben lidiar con los cortes de agua mediante el uso de los camiones cisterna y con un manejo responsable del agua almacenada.
La crisis del agua en Paraná es un problema complejo que requiere soluciones urgentes y sostenibles. La incertidumbre persiste sobre cuánto tiempo más deberán esperar los vecinos para acceder a este recurso básico tan fundamental para su vida diaria.
Por tal motivo, se hizo presente en el programa de El Ventilador, que se emite martes y jueves de 21:30 a 23 horas por Elonce, Julián Hirschfeld, secretario de Servicios Públicos.

En su primera intervención, explicó los motivos de la faltante de agua en diferentes sectores de la ciudad: “Creo que hay varios motivos: la falta de continuidad de obras de distribución en la ciudad de Paraná. Si bien desde que inició la gestión de Rosario Romero, la paralización de la obra pública a nivel nacional tiene como consecuencia la no continuidad del centro distribuidor sur y el acueducto metropolitano, que eran obras pensadas para la ciudad. En esos términos, inició la gestión. Por una decisión política de la intendenta, entendíamos que era prioritario solucionar una obra que podíamos realizar con fondos al 100% municipales. Encaramos el proyecto de licitación en agosto y por suerte y por trabajo eficiente en tiempo récord estamos presurizando y probando una cañería de 630 milímetros, que lleva agua de la Planta Echeverría a los centros distribuidores Lola Mora y Parque del Lago. Ese sector fue por muchos años en la ciudad de Paraná, tuvo cortes intermitentes. Hace 14 días no sufre cortes y tiene buena presión. Eso es importante contarles a los vecinos porque es importante dimensionar la gravedad del problema”.
En cuanto a la zona oeste, aclaró: “Se alimenta del centro distribuidor Ejército, que se alimenta de Planta Ramírez. Eso es alimentado de Planta Echeverría”. Además, aportó que realizarán una nueva obra en esa zona: “Vamos a licitar en el mes de febrero-marzo una obra de gran envergadura como un caño de 600 milímetros en dos tramos, que va a constituir desde la Panta Echeverría al Túnel Subfluvial y vamos a utilizar como canal una cañería vieja que tenemos, que vamos a enfundar por dentro, llega a Planta Ramírez y con eso poder captar mayor agua potabilizada y poder distribuir”.
“Si hay algo que ha hecho la intendenta, es concentrarse en los problemas de los paranaenses. Necesitamos estas dos cañerías hace mucho tiempo. En la zona oeste se sumaron dos barrios muy importantes: uno es el Procrear, que son 600 familias, y el otro es 500 Viviendas. También todo el desarrollo urbanístico en la zona oeste de la ciudad. Son más de 1.500 familias que consumen el agua y las obras de distribución que no se realizan son las consecuencias en la época estival”.
Nahuel Baridón, en primer lugar, consultó el impacto que tiene la ola de calor que vive Paraná en estos días a la hora del funcionamiento y la distribución del agua. En ese sentido, el invitado respondió: “Afecta claramente. Las temperaturas en estos días superan los 37 y 38 grados de sensación térmica. Eso afecta porque crece el consumo y la problemática del agua en Paraná y la región es compleja. Afecta porque se riegan las plantas, se llenan las piletas, se lavan los autos y se utiliza el agua de forma desmedida. Los paranaenses no cuidamos el uso del agua y no tenemos conciencia del uso del agua. El municipio invierte en la potabilización del agua, donde Paraná tiene una planta de 14 años, pero las obras de infraestructura que necesitamos es porque hay mayor consumo y desarrollo urbanístico”.

Para paliar este tipo de conflictos por los cortes o la baja presión, el municipio realizó encuentros con comisiones, a los cuales calificó como “fructíferas”.
Valeria Girard, por otro lado, trajo a colación la problemática de la gastroenteritis e indagó sobre la existencia de algún virus en el agua de Paraná. El titular de la Secretaría de Servicios Públicos contestó: “Realizamos estudios con el laboratorio de Obras Sanitarias. Paraná tiene una potabilización del agua muy buena, en comparación de otros municipios y el agua que se lleva con los camiones cisternas es agua potable, que retiramos de Planta Ramírez. Lo que sucede en algunos casos es que, al llenar los tanques con presión, que asistimos con camiones cisternas, los tanques se encuentran sucios y puede ser esa una de las probabilidades de lo que estás planteando”.

Javier Aragón recordó los planes estratégicos que quisieron llevar adelante José Carlos Halle y Humberto Varisco y, en consonancia, le pidió una reflexión y un mensaje para ciudadanos radicados en Bajada Grande, San Agustín y la zona oeste. “Nosotros estamos conversando mucho con los vecinos, por eso a las ocho de la mañana en el CIC de La Floresta concurro con el equipo de Obras Sanitarias a una reunión con los vecinos, donde comentamos las acciones”, manifestó el funcionario provincial.

“El compromiso del municipio con la gente está presente”, valoró Hirschfeld sobre los trabajos que continúan en Paraná para darle fin a este problema. Por tal motivo, recordó: “Hace más de dos meses que venimos trabajando en el plan de agua de la ciudad, por pedido de la intendenta. El plan del agua va a comprender las contingencias de distintos capítulos que pretendemos para la gestión del gobierno. Habrá cambio de válvulas y motores, ya que hay motores que datan de 1934 para que dimensionemos lo que estamos hablando. Tenemos un plan y una estrategia de gobierno con respecto al agua, pero lo iremos a comunicar en las próximas semanas. El objetivo es atender la emergencia y luego ir estableciendo distintos lineamientos entendiendo que las obras que necesita la ciudad son estas cañerías que vamos a tener disponibles”.
Por último, reflexionó: “Hay que tener conciencia del uso solidario del agua. No podes tener inspectores en todas las cuadras de la ciudad controlando el derroche. Es importante hacer el uso consciente y solidario del agua”.