

Con 77 años y una trayectoria que consolida como uno de los más grandes referentes del teatro argentino, Pepe Cibrián Campoy estuvo en Elonce para presentar su nueva obra “Calígula”, que se estrenará el próximo 11 de abril en el Teatro 3 de Febrero de Paraná. En el programa Nunca es Tarde, Cibrián compartió sus reflexiones sobre la democracia, la cultura argentina y su cariño por la ciudad de Paraná.
Recuerdos de Paraná y su vínculo con el Teatro 3 de Febrero
Con nostalgia, Pepe recordó sus visitas al Teatro 3 de Febrero, un espacio que le trae memorias entrañables de sus padres. “Este teatro me recuerda a mis padres, que venía con ellos y luego a todas las obras que vine a representar aquí”, confesó. También destacó el trabajo de los “avisadores” en los teatros, una figura que, según él, cumplía un rol fundamental al asistir a los actores y todo el equipo, desde comprar comida hasta ayudar en tareas logísticas entre función y función. En Paraná, recordó con cariño a un matrimonio de avisadores “muy amables y cariñosos” que hicieron de su experiencia en la ciudad aún más especial.
La importancia de la democracia y la crítica al poder
Cibrián reflexionó sobre el contexto social y político de Argentina, destacando la relevancia de la democracia. “La democracia es muy importante, porque nos permite discrepar con los demás y vivir en una sociedad diversa. Y la gente de la sociedad es muy mágica”, sostuvo, subrayando que “uno puede decir lo que piensa, y eso es un derecho fundamental”.

Sin embargo, también expresó sus preocupaciones sobre la persistencia de la corrupción y la impunidad en el poder. “El poder siempre fue igual, la corrupción, la impunidad, el senado... lamentablemente sigue igual”, comentó. A pesar de ello, reconoció los avances que se han logrado con leyes como el matrimonio igualitario y la ley de divorcio, que han ayudado a regularizar y mejorar derechos fundamentales.
“Si bien hay leyes que han sido muy buenas y maduras, hay cosas que aún siguen siendo un desafío, como la adopción de hijos.
El regreso de “Calígula”: una reflexión sobre el poder y la corrupción
En cuanto a su obra más reciente, “Calígula”, que vuelve a los escenarios tras 42 años, Cibrián destacó que la historia sigue siendo una crítica al poder absoluto, la corrupción y la miseria del pueblo. “La obra refleja la locura, la opresión y la intolerancia del poder. Y cómo los pueblos se ven atrapados por el miedo y la corrupción”, explicó.
“Calígula”, que se estrenó en 1983 con un libreto de Cibrián y música de Martín Bianchedi, se presenta ahora con una puesta en escena renovada. “Es una obra que sigue siendo relevante hoy, porque habla de los abusos del poder y de cómo el pueblo paga por los errores de sus líderes”, expresó el director, quien señaló que, aunque la figura de Calígula es histórica, en la obra se toma como un símbolo de la corrupción y los excesos del poder.

Una mirada optimista hacia el futuro de Argentina
A pesar de las críticas al poder y a la situación política, Cibrián se mostró optimista sobre el futuro de Argentina. “Quiero que a Argentina le vaya bien porque es un país mágico. Somos un país con una humanidad y una calidez muy grande”, afirmó. Además, subrayó la importancia de valorar la historia y la cultura del país, y lamentó que muchas veces se pierda esa conexión con lo verdaderamente valioso.
“Soy optimista. Creo que la cultura argentina tiene mucho por ofrecer y que debemos seguir luchando por un país mejor. La gira de Calígula comenzó en Gualeguaychú, luego en Paraná y continuará por todo el país. Somos 23 personas trabajando en esta obra, y aunque es costoso llevar la tecnología, las luces, el vestuario, y los actores, lo haremos igual aquí que en Buenos Aires”, explicó, destacando el esfuerzo y la pasión que pone en cada proyecto.
La importancia de los medios y el papel de la cultura
Finalmente, Cibrián reflexionó sobre el rol de los medios de comunicación en la actualidad y cómo los programas de streaming pueden influir en la cultura. “En muchos programas se dicen cosas horrorosas y espero que eso no sea la cultura predominante. En nuestro país, hay una humanidad y una calidez muy grande. Somos un país mágico siempre, y debemos mantener esa esencia”, concluyó.