REDACCIÓN ELONCE
Con el cierre de la temporada, las ligas de fútbol infantil llegan a sus fechas decisivas, donde la emoción de los niños contagia a todos en el predio. Este sábado, el predio de Colonia Avellaneda fue el escenario de la final de una liga local, donde las categorías más pequeñas se enfrentaron en el partido decisivo. Entre abrazos y lágrimas de alegría, los pequeños jugadores celebraron sus logros en el campo.
Itam, de la Escuelita San Julián, emocionado y sin poder contener las lágrimas, compartió su felicidad tras el partido: “Salimos campeones”, expresó con orgullo. “Siempre peleamos la liga y esta vez ganamos”, añadió con entusiasmo. Conmovido, dedicó su triunfo a su familia: “Se lo dedico especialmente a mi mamá”.
Otro de los protagonistas fue el arquero del equipo ganador, quien expresó su alegría por el título: “Salimos campeones al fin, este es mi primer torneo y es muy emocionante”. Al ser consultado sobre su desempeño, respondió con humildad y una sonrisa: “Me comí dos goles, pero no importa”.
La intensidad de la competencia y las enseñanzas de cada partido también fueron relatadas por uno de los jugadores, que recordó el esfuerzo realizado en temporadas anteriores: “La emoción es normal porque el año pasado perdimos por un punto. Nos golpearon, perdimos mal, y este año como se nos dio tanto, ganamos por goleada”.
Entre los pequeños futbolistas también se encontraba Malena, una niña de nueve años que juega de arquera en el equipo de Ministerio. Con una sonrisa, contó: “A mí me gusta mucho el fútbol, antes jugaba en otras posiciones, pero me siento más cómoda en el arco”. Su dedicación y amor por el deporte destacan en cada jugada.
Otro joven del equipo Universitario compartió su experiencia al finalizar la temporada, recordando el esfuerzo compartido con sus compañeros: “Este es mi primer año con el equipo”, mencionó. Lucio, también del equipo Universitario, agregó con entusiasmo: “Aprendí un montón de cosas”.