La escuela Nº1 “Del Centenario” de Paraná cumple 110 años desde su fundación y la comunidad educativa realizó un acto sobre avenida Alameda de la Federación.
“Estamos muy contento por el acto, esta escuela para nosotros significa educación pública, de calidad y gratuita”, dijo la directora, Marcia Cáceres, a Elonce al sostener que la escuela al momento y tiene una matrícula de unos 800 alumnos.
Destacó que “el edificio es impotente, monumental, representando ese Estado nación que surge y desde ahí viene el origen del establecimiento”. Asimismo, sostuvo que desde el 25 de mayo están realizando diversas actividades para conmemorar estos 110 años. “El objetivo era seguir manteniendo esta alegría”.
“Escuela pública siempre”
“Hay que apostar junto con las familias a la educación pública y de calidad siempre”, anheló.
En esta oportunidad, el viceintendente, David Cáceres, se mostró muy contento p por el acto y destacó que “es un orgullo que este colegio, que es patrimonio nacional y provincial, cumpla 110 años. Es un compromiso con la educación pública, que fue una de las bases de la construcción de este país”.
"Momento histórico y la realidad cotidiana de la escuela pública"
A su turno, el ex rector, Profesor Hugo País, mencionó: “celebramos los 110 años de esta escuela que me cobijó muchos años como rector. La escuela significa un momento histórico y la realidad cotidiana de la escuela pública, realmente este lugar me trae a la memoria que se trata de la única escuela que se y terminó en el país de las siete que se mandaron construir en aquella época”.
País, recordó que “en este colegio nació la secundaria, que tenía orientación en comercio exterior, se dictaban dos idiomas básicos, inglés y portugués, además del italiano que lo conseguimos a través de un convenio con la embajada italiana. También esta escuela dio lugar a crear tres carreras de grado y dio pie a lo que hoy se llama Facultad de Gestión en Uader.
“Servimos como formación de nivel terciario de la provincia. Mi lugar favorito siempre fue el patio, lugar donde hablaba con los chicos, tenían un vínculo de las familias, es una comunidad educativa integrada”., cerró.
A su turno, el actual rector, Sergio Dines, contó que este acto, también es “en defensa de la escuela pública y este lugar es la imagen de una época que fue monumental. Mañana realizaremos una bailanta popular e invitamos a todos a la comunidad que se sume".
La bailanta se llevará a cabo en los gimnasios cubiertos del sector primario y contará con la actuación de las bandas Pont a Bailar y Aquellas Viejas Cumbias. Las entradas están disponibles a un precio de 2.000 pesos en venta anticipada y 2.500 en puerta.
Sobre la escuela
El 25 de mayo de 1910 se colocó la piedra fundamental del edificio, respondiendo a una disposición del Congreso Nacional que promovía la construcción de escuelas monumentales en conmemoración de la gesta patriótica de 1810.
El proyecto, que se desarrolló sobre una manzana considerando superficie cubierta, patios y jardines, correspondió a los ingenieros Molina Civit y Giró. Su inauguración se produjo el 21 de setiembre de 1914. El 7 de octubre de 1924, se creó el Museo Escolar Central, para el cual se destinó el subsuelo del edificio, ocupación que se prolongó hasta 1999. Su ingreso principal se encuentra sobre Alameda de la Federación.
Arquitectura
La planta adopta una tipología en forma de T siguiendo una estricta simetría. El edificio se organiza en torno a un cuerpo central que contiene un atrio, hall de ingreso, un gran espacio central en doble altura donde se ubica la biblioteca, el salón de actos en forma de hemiciclo y el gimnasio semicubierto. A ambos lados de este cuerpo se desarrollan paralelo a la avenida el sector de aulas con galerías cubiertas rematando ambos en los grupos sanitarios, que a manera de U contiene a ambos patios.
Esta obra se enmarca dentro del neoclasicismo francés, con su fachada compuesta a partir de un cuerpo central, el cual se jerarquiza con la escalinata que da acceso al atrio el cual se adentra en el edificio en el ingreso principal. Éste se halla flanqueado por robustas columnas apareadas apoyadas en un gran basamento y con capiteles estilo corintio que, adelantándose hacia el frente, forman un espacio semicircular cubierto por una media bóveda casetonada. A ambos lados se practican accesos secundarios. Todo el conjunto se remata con una cornisa de dimensiones importantes sobre la que se ubica un frontis de líneas curvas, debajo del cual se dejó un lugar para un reloj que nunca llegó a colocarse.
Las alas laterales de la fachada se componen por un importante basamento, una sucesión ritmada de ventanas organizadas de a tres, separadas por una doble pilastra rematada por medallones y coronada por un friso decorado con guardas. Los muros tienen paños tratados simulando ladrillo a la vista y los extremos ciegos son decorados con detalles en relieve. La biblioteca, como espacio central articulador de todo el edificio, se corona con una cúpula vidriada de sección cuadrangular.