Este fin de semana se intensificaron los operativos de control vehicular y de alcoholemia por parte de la Municipalidad de Paraná.
Los lugares elegidos fueron los de mayor concentración en la noche como El Rosedal, Costanera y Puerto Nuevo. Los controles fueron en la vía pública, con la colaboración de la Policía de Entre Ríos.
Desde que se reiniciaron los controles por parte de la comuna se han secuestrado un total de 19 autos y 12 motos; a su vez se han labrado más de 50 actas de infracción, en su mayoría por no contar con documentación de carnés de conducir o seguro del automotor.
Por la Municipalidad intervino personal de la Secretaría de Seguridad y de las Direcciones de Tránsito; Colisiones, y Habilitaciones Comerciales.
Entre otras infracciones habituales se constató el no uso de cinturones de seguridad y la falta de documentación al momento de sentarse al volante, y salir a manejar sin los carnés de conducir y el seguro automotor son de uso obligatorio.
En los casos detectados de alcoholemia positiva, se secuestraron los vehículos. En esos casos, son llevados a la zona donde Tránsito tiene el depósito, en la zona de la vieja Terminal de ómnibus. Una vez labrada el acta, el auto es retenido y se da intervención el juez de faltas en un trámite que sigue su curso de manera administrativa.
Desde el Municipio, se destacó la importancia de la colaboración de la Policía de Entre Ríos, ya que se suscitan casos de poca colaboración por parte de los conductores, que se niegan en muchos casos a los controles de alcoholemia o se molestan al pedirles la documentación que exige la Ley Nacional de Tránsito. Por lo general el personal municipal recibe un mal trato o directamente los conductores son agresivos y la presencia policial permite el trabajo con seguridad a la hora de hacer efectivo los operativos.
