El robo de cables se ha convertido en una problemática creciente en la ciudad de Paraná. Hasta la fecha, la Dirección de Servicios Públicos ha registrado más de 150 denuncias por este delito, lo que ha afectado tanto la seguridad como el desarrollo de obras en la ciudad. La situación ha alcanzado niveles preocupantes, sobre todo en la zona céntrica, lo que genera un alto riesgo para los ciudadanos debido a los peligros eléctricos que deja a su paso.
El director de Servicios Públicos de la Municipalidad de Paraná, Kevin Bolzan, explicó a Elonce que esta problemática se ha intensificado a lo largo del año. “Es una problemática que ha ido creciendo exponencialmente en todos los lugares de Paraná, pero se ha focalizado en la zona centro. Esto nos preocupa mucho por la cantidad de gente que concurre esa área, ya que el robo de cables expone a la población a un riesgo muy grande. Cuando roban de una columna, los cables quedan expuestos, lo que es muy peligroso”, advirtió Bolzan.
Un problema de seguridad y recursos
El impacto del robo de cables no solo se refleja en la pérdida económica para la municipalidad, sino también en la seguridad de los ciudadanos. “Más allá de la pérdida económica que esto genera y el hecho de que una calle quede sin iluminación, el principal riesgo es el peligro eléctrico. Una persona puede tocar sin querer una columna o un cable expuesto y sufrir una tragedia”, agregó el funcionario.
Hasta el momento, el registro de la municipalidad indica que han sido vandalizadas 800 columnas y robados alrededor de 10 mil metros de cable. “Es un costo altísimo para nosotros y nos impide avanzar en la mejora de luminarias en otras zonas, especialmente en el recambio a luces LED y la instalación de nuevas columnas. La intendenta Rosario Romero tiene como objetivo mejorar la iluminación en zonas poco iluminadas, pero estos hechos nos obligan a destinar nuestras cuadrillas a reponer cables en áreas donde ya había luz, lo que retrasa otras obras”, explicó.
Concientización y colaboración vecinal
En respuesta a esta situación, Bolzan hizo un llamado a la comunidad para que colabore en la detección y denuncia de estos delitos. “La idea es concientizar a los vecinos para que, si ven algo sospechoso, avisen a la policía o a Alumbrado Público. Hemos recibido más de 150 denuncias de vecinos, lo cual es muy útil para justificar los gastos excesivos que estamos teniendo en la reposición de cables. Pedimos a los vecinos que sigan colaborando”, señaló.
Metodología de los robos y medidas de seguridad
Sobre los responsables de los robos, Bolzan informó que han recibido videos enviados por los vecinos, que muestran cómo operan los ladrones. “La metodología nuestra es soldar las tapas de las columnas, aunque no deberían estar soldadas, pero lo hacemos para evitar que roben los cables. Sin embargo, a pesar de esto, los delincuentes logran abrirlas y sacar los cables”, lamentó.
El robo de cables es una amenaza creciente en la ciudad, y mientras las autoridades buscan soluciones, es fundamental la colaboración de los ciudadanos para frenar estos hechos delictivos y garantizar la seguridad de todos.