Liam Payne, el carismático cantante de 31 años y exintegrante de One Direction, dejó una fortuna considerable tras su trágica muerte al caer del balcón de un hotel en Palermo, Buenos Aires. Con una fortuna estimada en 70 millones de dólares, Payne se destacó en la industria musical desde que inició su carrera a los 16 años, convirtiéndose en una figura icónica del pop global.
La herencia del artista recaerá en su hijo, Bear, quien apenas tiene 7 años. Debido a su corta edad, la administración de la herencia estará a cargo de su madre, la cantante Cheryl Cole, hasta que Bear alcance la mayoría de edad.
One Direction
Liam Payne alcanzó el éxito mundial entre 2010 y 2015 con One Direction, un fenómeno que lo catapultó a la fama junto a sus compañeros Harry Styles, Zayn Malik, Louis Tomlinson y Niall Horan, quienes también se dieron a conocer a través del programa de talentos The X Factor. Aunque su carrera en solitario fue menos impactante, Payne mantuvo una sólida presencia en la industria, incluso actuando como embajador de la marca Hugo Boss en 2019 y 2020.
Entre sus activos más destacados se encuentran dos lujosas mansiones: una en Malibú, California, valorada en 10 millones de dólares, que cuenta con impresionantes características como cascadas, estanques de peces koi y su propio estudio de grabación; y otra en Surrey, Inglaterra, avaluada en 8,5 millones de dólares, que incluye una cancha de fútbol, una cancha de tenis y una sala de cine.
La vida y carrera de Liam Payne, marcada por su talento y éxito, dejarán un legado que perdurará a través de su hijo, mientras Cheryl Cole asume la responsabilidad de administrar su considerable herencia. (Noticias Argentinas)