Jésica Cirio atraviesa una etapa de paz y renovación tras un año particularmente difícil. En 2023, la modelo y conductora se vio envuelta en un torbellino mediático tras terminar su relación de diez años con el político Martín Insaurralde.
La ruptura, en medio de un escándalo nacional, estuvo marcada por la renuncia de Insaurralde a su cargo de funcionario público y las denuncias que lo acusan de no poder justificar los fondos con los cuales vivió una vida de lujo junto a su amante, la modelo Sofía Clerici. Este escándalo sacudió a la opinión pública, y Jésica no quedó exenta de la controversia.
El impacto mediático no solo afectó su vida personal, sino también su carrera profesional. Cirio fue apartada de la conducción de “La Peña de Morfi” en Telefe, lo que agravó aún más el estrés al que se vio sometida. Sin embargo, la modelo decidió alejarse de las luces de la fama para centrarse en su bienestar personal.
En mayo de este año, Jésica se casó nuevamente, esta vez con el empresario Elías Piccirillo, lo que marcó un nuevo capítulo en su vida. Desde entonces, se mantuvo lejos de los medios, dedicando su tiempo a su nueva familia y a su hija Chloé, quien tiene 7 años.
“Este año logré tener paz”
En una reciente entrevista con “Socios del Espectáculo”, Jésica Cirio habló abiertamente sobre cómo ha vivido estos últimos meses de su vida y cómo logró encontrar equilibrio. “Este año logré tener paz. Estoy muy tranquila”, expresó con una sonrisa en el rostro.
La conductora también fue contundente al referirse a su relación con Martín Insaurralde, dejando en claro que la ruptura, aunque dolorosa, ya es parte del pasado. “Martín es el papá de la nena. Hoy ya pasó bastante tiempo. Todo va sanando, todo va mejorando. Va todo mucho mejor. Fue más emocional que el tema legal. Todo es tiempo, pero ya pasó. Lo dejo atrás. Hay paz por todos lados y eso es lo que más buscamos. Di vuelta la página y disfruto mucho mi vida”, aseguró.
Lecciones aprendidas
A pesar de la tranquilidad que ahora siente, Jésica no duda en reconocer que el camino no fue fácil. La modelo admitió que "fue un año difícil" y que el estrés mediático al que estuvo expuesta la afectó más de lo que imaginaba.
"No estaba acostumbrada a tanto estrés mediático. Hacía muchos años que no pasaba algo tan fuerte como lo que pasó y sí, un poco me golpeó", confesó. (Con información de NA)