El Gobierno decidió, en el marco del Presupuesto 2025, eliminar el ajuste de las asignaciones familiares que se realizaba mediante la ley de movilidad. En su lugar, estas asignaciones quedarán sujetas a la fórmula jubilatoria actual establecida por el Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) 274, que modificó el régimen anterior.
El artículo 68 del proyecto de Presupuesto 2025, que ya fue presentado al Congreso, establece la derogación del artículo que indicaba que "las asignaciones familiares previstas en la ley 24.714, sus normas complementarias y modificatorias, salvo la establecida en el inciso e) del artículo 6° de la ley 24.714, serán móviles". Además, se anula el cálculo del índice de movilidad conforme al Anexo de la ley 26.417.
Norma
También se elimina la disposición de la ley 24.714 que atribuía a la Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSES) la responsabilidad del cálculo de la movilidad según las pautas de dicha ley.
El artículo siguiente del Presupuesto 2025 confirma que el ajuste de las asignaciones familiares se realizará conforme a la nueva fórmula jubilatoria basada en la inflación. Si el proyecto es aprobado, la actualización de las asignaciones, que actualmente se realiza mediante un DNU, adquirirá fuerza de ley.
Según la nueva fórmula, "los haberes se actualizarán mensualmente de acuerdo con las variaciones del Nivel General del Índice de Precios al Consumidor Nacional publicado por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC)".
Presentación del Presupuesto y metas económicas para 2025
Milei presentó personalmente el Presupuesto ante el Congreso, una tarea que generalmente corresponde al Ministro de Economía. Explicó su decisión diciendo: "Decidí hacerlo personalmente por dos razones: porque soy economista y estoy orgulloso de eso". Además, el presidente destacó que el Presupuesto "no es una ley más" sino que es la "ley de leyes", con el déficit cero como su piedra angular para controlar el "gasto compulsivo" de los gobiernos.
"Hoy estamos aquí para presentar un Presupuesto nacional que va a cambiar la historia de nuestro país, de manera que volvamos a ser la Argentina grande que alguna vez fuimos. Hoy venimos aquí a ponerle un cepo al Estado", enfatizó Milei.
Agregó que el presupuesto "blinda el equilibrio fiscal, sin importar el escenario económico", asegurando que el resultado fiscal estará equilibrado independientemente de las condiciones macroeconómicas.
Para el próximo año, el Gobierno espera que la economía crezca un 5%, que la inflación se desacelere al 18,3%, que el dólar oficial avance a un ritmo similar a los precios, ubicándose en 1.207 pesos en diciembre, y un superávit primario del 1,3% del PIB, con equilibrio en el resultado financiero del Tesoro. Estos datos constituyen los principales indicadores macroeconómicos del proyecto de presupuesto presentado al Congreso.