Pablo Fontanini, ingeniero agrónomo de la Bolsa de Cereales de Entre Ríos, habló con Elonce sobre la situación de los cultivos y las escasas precipitaciones que se han registrado en la provincia.
El último trimestre de junio, julio y agosto, cerró con lluvias por debajo de lo normal en la mayor parte del territorio, “lo cual hace una transición hacia la primavera que está requiriendo la ocurrencia de precipitación, sobre todo pensando en la siembra de maíz de primera que estamos en la fecha óptima”.
Normalmente septiembre “es el mes donde se concentra la siembra de maíz y salvo sitios puntuales donde ha habido eventos más destacados en el resto del territorio, los productores están aguardando la ocurrencia de lluvias que mejore la humedad en la cama de siembra, sobre todo en los primeros 20 centímetros como para que la implantación del cultivo sea adecuada y arranque bien el nuevo ciclo”.
Estas lluvias también son necesarias para el trigo. Vale recordar que agosto de este año fue mucho más frío que el agosto del año pasado y en relación a los últimos 4 años también se han juntado bastantes horas de frío y eso retrasa el crecimiento del cultivo. En algunos sitios del sureste de la provincia donde en las últimas semanas ha habido algo más de precipitación, el cultivo se encuentra en una mejor condición. “A nivel provincial estamos evaluando que aproximadamente el 80% del área está en una condición de buena muy buena, concentrándose la mayor parte en una condición buena hasta ahora; y gracias a estas pequeñas lluvias ha habido, en las últimas semanas, una mejora de 8 puntos porcentuales en la condición de buena a muy buena”, indicó el profesional.
Agosto frío
Sobre las bajas temperaturas, Fontanini recordó que en el año 2003 “tuvimos un invierno muy tenue y se nota bastante la diferencia en las horas de frío entre el 2023 y el 2024. Esta situación incide en la tasa de crecimiento del cultivo, la cual se reduce. Por otra parte, también hay que destacar que mantiene la sanidad del cultivo de trigo; en general las enfermedades de hoja fúngicas no se detectan y eso es un punto a favor para para el cereal”.
Asimismo, se han registrado “algunos problemas de implantación en los trigos ciclo corto, y también en lo que es brasicáceas, sobre todo lo que es de carinata, colza, algo de camelina que no lograron alcanzar el stand de plantas óptimas para para obtener un buen rendimiento”.
Precipitaciones
Respecto a lo que se espera que ocurra durante la primavera, Fontanini, mencionó que se está aguardando “esa transición de salida del invierno hacia la primavera y en el corto plazo no se visualizan precipitaciones de importancia en la región. Habrá que esperar para los próximos días cómo se comporta la segunda quincena de septiembre y esperemos que aporte esos 30 o 40 milímetros que se necesitan para que la siembra de maíz pueda realizarse en tiempo y forma”.
Finalmente, y en relación a lo que podría ocurrir en el verano, dio cuenta que “la mayoría de los modelos están situando al Pacífico ecuatorial en una situación de neutralidad, por lo tanto, debería ser un verano normal para la región, lo cual no quita que se puedan dar cursos secos”. Elonce.com
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