El Gobierno de China vuelve a devaluar su moneda por segundo día consecutivo. El yuan se depreció 1,3% en las primeras horas del miércoles. Esto se suma al 1,9% del martes y está noticia vuelve a causar preocupación en los mercados del mundo.
Los movimientos del yuan respecto del dólar mostraron la mayor revisión a la baja del valor de su moneda en dos décadas, y reformó el sistema cambiario para estimular su economía tras la caída del comercio exterior.
El Banco Popular de China anunció en Beijing una renovación en el mecanismo de fijación del tipo de cambio del yuan para tratar de acercarlo a su valor real del mercado, que tuvo como efecto inmediato una caída de 1,9% de la divisa china en comparación con el dólar, una medida sorpresiva porque se trata de la mayor devaluación de la moneda en los últimos veinte años.
Esta etapa de la economía China apunta a favorecer las exportaciones y frenar la salida de capitales del país, aunque las mismas autoridades aclararon que de ahora en más el tipo de cambio quedará más expuesto a las oscilaciones y los mecanismos naturales del mercado, lo que podría, a su vez, abrir las puertas a una nueva devaluación de la moneda, según distintos analistas citados por las agencias DPA, EFE y Ansa.
La decisión había sido reclamada repetidamente por Estados Unidos que, sin embargo, esta tarde adoptó una cautelosa posición a través de su Departamento del Tesoro que consideró que "aún es pronto para juzgar las implicaciones completas de la modificación en el tipo de cambio" aunque interpretó que "estos cambios son otro paso en su camino hacia un régimen cambiario más determinado por el mercado".
<b>Efecto en Argentina</b>
"En nuestro caso, con un tipo de cambio crecientemente atrasado, esta devaluación agrava el panorama de pérdida de competitividad generado por la caída en los precios internacionales de las commodities y, muy especialmente, la devaluación de la moneda brasileña", sostuvo Jorge Todesca, director de la consultora Finsoport.
"La devaluación del yuan no impactará de forma inmediata en la Argentina pero cuando se mueve alguna variable del Gigante Asiático se mueve todo", indicó Eric Ritondale, economista Senior de Econviews en diálogo con Cronista.com.
En este sentido agregó: "Esto es un tema negativo que se suma a la caída de las exportaciones, debilitamiento del real y del tipo de cambio de países emergentes, sumando a la baja de los granos".
El presidente del Banco Central argentino, Alejandro Vanoli, en su cuenta de twitter opinó que "la devaluación del yuan no afecta patrimonialmente al BCRA porque los activos en dicha moneda están perfectamente calzados con los pasivos". Además, resaltó que "el BCRA continuará con su política de flotación administrada para consolidar la estabilidad el empleo y el desarrollo con inclusión social".
Todesca remarcó que "en este contexto, será difícil mejorar la posición fuertemente deficitaria de nuestro comercio con China. Aunque la magnitud de la corrección cambiaria se perciba como leve a la luz de los movimientos locales del tipo de cambio, este movimiento tendrá fuerte impacto mundial".
Los economistas consultados además creen que el Banco Central tiene un poder de acción el cual en parte está limitado. Las tasas de inflación actuales le impiden realizar movimientos bruscos con el tipo de cambio local, sin afectar los precios internos.
"Está situación le pone más presión a la Argentina y el Central en un contexto de tasas de inflación alta, cualquier movimiento que intente puede agravar la suba de precios", finalizó Ritondale.