Otra vez pasó por el quirófano Carlos Francisco Delfino. Su amor por el básquetbol es más fuerte que esa dolencia crónica en el pie derecho que lo mantiene fuera de competencia desde abril de 2013. "Llevo siete operaciones solamente en mi pie. Eso habla por sí solo de lo que quiero volver a estar en una cancha", subrayó uno de los referentes de la Generación Dorada.
Reposa en la ciudad italiana de Bologna el escolta que se consagró en Atenas en 2004 y anhela estar en Río de Janeiro en agosto próximo. De lograrlo, será su cuarta participación en Juegos Olímpicos. A esta altura, es un deseo ambicioso, pero el argentino no pierde la esperanza.
"La operación fue muy buena y estoy contento con la recuperación. Con los tiempos vengo bien, pero, como siempre, quiero ser cauto porque ya pasé por esto", señaló el jugador a la agencia Télam, luego de que el médico italiano Sandro Giannini trabajara en la molestia que Delfino padece en el hueso escafoides.
"Sólo dentro de un mes sabré bien dónde voy a a estar parado con miras a mi futuro. Pero sí puedo decir que estoy más que contento con los resultados hasta ahora", expresó quien en la NBA jugó en Detroit Pistons, Toronto Raptors, Milwaukee Bucks y Houston Rockets. La camiseta de este último club defendía en 2013 cuando se lesionó en un partido de playoffs ante Oklahoma City.
"Mi aspiración es volver a una cancha pronto y soy optimista", agregó Delfino, de 33 años, que el año pasado llegó a ser citado por el DT Sergio Hernández cuando el seleccionado comenzó el trabajo para el preolímpico de México. Finalmente, Carlos fue desafectado cuando se resintió.
"Sergio sabe todo lo que tiene que saber y es una de las personas que siempre estuvieron muy atentas y cerca, preguntando sobre mi estado. Eso ya es algo grande para mí", enfatizó el basquetbolista. Un referente que aún no ha jugado su última bola.