"Este es un fin de ciclo, muchos jugadores se despiden", dijo Marcelo Gallardo luego de la derrota ante Barcelona por la final del Mundial de Clubes en Japón. Tras la obtención de la Copa Libertadores en agosto último, el equipo se desarmó y nunca volvió a ser el mismo a pesar de haber demostrado durante algunos minutos un buen pasaje futbolístico ante el conjunto catalán.
Ahora vendrá el descanso luego de un año muy cargado para River, pero el Muñeco es consciente que para seguir peleando en todos los frentes e intentar repetir lo hecho deberá rearmar el grupo y tener un plantel competitivo.
Matías Kranevitter y Carlos Sánchez jugaron su último partido con la camiseta de River. El primero continuará su carrera en Atlético de Madrid, en España, mientras que el segundo se irá a México para defender la camiseta de Monterrey.
Pero hace tiempo que Marcelo Gallardo está analizando alternativas pensando en el River 2016, con el que en el primer semestre tendrá como desafíos el torneo local y la Libertadores, donde el conjunto millonario se presentará como defensor del título.
El Muñeco sabe de la importancia de ambos jugadores, integrantes de la columna vertebral de su ciclo. Y por eso River ya tiene acordado el regreso de Nicolás Domingo, de Banfield, a cambio de US$ 600.000. El club de Núñez pagará 350.000 dólares más 250.000 de la moneda norteamericana por la deuda que el Taladro mantiene con el futbolista.
Domingo surgió de las inferiores del club de Núñez, aunque luego siguió su carrera en Arsenal, Peñarol de Montevideo y Deportivo Cuenca, de Ecuador. Como Gallardo no quiso que se filtren nombres de refuerzos y se enojó cuando se supo de su llamado a Lucas Orban (Valencia), lo de Domingo lo mantuvo en secreto y se supo casi cuando estuvo todo acordado entre las partes.
Además, Gallardo quiere otro mediocampista central: Joaquín Arzura. Más allá de que los principales dirigentes millonarios están en Japón, River ya inició gestiones para incorporar al mediocampista de Tigre. Incluso ofreció 1.200.000 dólares por su pase. Pero el club de Victoria pretende 1.700.000, por lo que hoy la diferencia que separa una intención de una realidad es de US$ 500.000.
Desde ambas partes son optimistas, aunque cuando regresen a Buenos Aires retomarán el diálogo. Rodrigo Molinos, presidente de Tigre, dijo hace unos días: "Estamos negociando con River el tema de Arzura, algunos de nuestros dirigentes fueron a Japón a hablar", y por último agregó: "Aún no sabemos el porcentaje, cuando vuelva River de Japón vamos a avanzar".
¿Otras alternativas para el puesto? Gastón Gil Romero (Estudiantes), aunque Gallardo preferiría, en igualdad de condiciones económicas, a Arzura. Es que Guido Rodríguez bajó en la consideración del Muñeco y podría continuar en otro club del fútbol argentino (¿Arsenal?). También se mencionó a Alexander Mejía, de Atlético Nacional de Medellín, pero fue rápidamente descartado por el entorno de la dirigencia de River que está por estas tierras.
Gallardo pretende además un marcador central, un volante ofensivo y dos delanteros (ver abajo). Para el puesto de defensor se anotaron dos futbolistas de Rosario Central: Javier Pinola y Alejandro Donatti. Como volante, solicitó a Ignacio Fernández, el zurdo de muy buen rendimiento en el último semestre de Gimnasia.
<b>Scocco y Silvio Romero, los puntas</b>
Marcelo Gallardo pretende además sumar dos delanteros para reforzar al plantel para 2016. Los apuntados son Ignacio Scocco (Newell's) y Silvio Romero (Jaguares de Chiapas, de México). El equipo rosarino está dispuesto a negociar a Scocco.
<b>Marcelo Barovero confirmó su continuidad en Núñez</b>
Había un tema que preocupaba a los dirigentes, la renovación contractual de Marcelo Barovero, quien tiene vínculo hasta junio del próximo año.
"Seguiré. El 10 u 11 estaremos presentes de nuevo", respondió el arquero, para tranquilidad de todos. Aun así dejó en claro que tendrá que dialogar con los directivos para limar las diferencias: "Ahora a descansar, las cosas personales que estaban en veremos la hablaremos". De esta manera, River se asegura la continuidad de su arquero, capitán y el mejor jugador en el Mundial de Clubes.
En algún momento, se especuló con la chance que pueda seguir su carrera en el fútbol mexicano; sin embargo, ninguna oferta se cristalizó y su futuro seguirá estando en Núñez, donde es uno de los máximos ídolos.