Una nueva mancha de violencia opacó este lunes en Mar del Plata el partido entre Aldosivi y Lanús. Durante el calentamiento previo del elenco anfitrión en las cercanías de la tribuna granate, poblada gracias al retorno de las hinchadas visitantes, Pablo Lugüercio recibió el impacto de un proyectil en el rostro.
Inmediatamente, el atacante local se retiró sentido al vestuario y se especuló con que el partido iba a ser suspendido. Mientras Guillermo y Gustavo Barros Schelotto dialogaban con Fernando Quiroz, el inicio, pactado para las 20, comenzó a demorarse.
Finalmente, asumiendo una competencia cuestionable, Lugüercio dio su OK para jugar el encuentro, que finalmente arrancó con veinte minutos de demora. "Estoy bien, es lamentable. No pasa nada y sigue todo?", se limitó a decir rumbo al campo de juego. "Pablo es muy noble. Lo importante es que está bien y se juega el partido", expresó el DT Quiroz. Y reflexionó: "Hay cosas con las que hay que tener más cuidado".
Por las molestias derivadas del ataque, el jugador pidió el cambio apenas comenzado el complemento y terminado el partido fue trasladado a un hospital, donde se le diagnóstico una úlcera en la córnea del ojo derecho.
<blockquote class="twitter-tweet" lang="es"><p lang="es" dir="ltr"><a href="https://twitter.com/hashtag/LaFotoDelD%C3%ADa?src=hash">#LaFotoDelDía</a> Así quedó Lugüercio tras recibir un proyectil en Aldosivi-Lanús. <a href="http://t.co/ANAMUGtAJj">http://t.co/ANAMUGtAJj</a> <a href="http://t.co/nAGm5yvOv9">pic.twitter.com/nAGm5yvOv9</a></p>— TyC Sports (@TyCSports) <a href="https://twitter.com/TyCSports/status/651237977708961792">octubre 6, 2015</a></blockquote>
<script async src="//platform.twitter.com/widgets.js" charset="utf-8"></script>