El Gran Premio de Las Vegas dejó una gran preocupación en el equipo Williams, tras el fuerte accidente sufrido por el piloto argentino Franco Colapinto durante la segunda sesión de clasificación. El impacto, que fue catalogado como "significativo" por la escudería, provocó daños importantes en su monoplaza y ha puesto en duda su participación en la carrera del domingo, que comenzará a las 3 de la mañana, hora de Argentina.
*Así se llevaron el auto de Colapinto tras el accidente
El accidente ocurrió cuando Colapinto intentaba mejorar su tiempo para avanzar a la Q3, en una maniobra arriesgada en una de las últimas curvas de la sesión. El joven piloto, que había logrado superar el corte inicial y se encontraba en la 14ª posición, golpeó fuertemente el muro con el neumático izquierdo. El impacto provocó un segundo choque con las barreras, lo que dejó al monoplaza gravemente dañado.
El equipo de Grove emitió un comunicado en sus redes sociales, confirmando que el piloto había sufrido un impacto de más de 50G, lo que exigió una revisión médica inmediata. "Un impacto de esta magnitud es obviamente significativo y grave, y Franco deberá ser evaluado nuevamente mañana antes de que sepamos si está en condiciones de competir", se indicó en el mensaje.
*La reacción de los mecánicos tras el accidente de Colapinto
A pesar de la magnitud del accidente, Colapinto logró salir por sus propios medios del coche, sin signos evidentes de lesiones graves. Sin embargo, siguiendo el protocolo, fue trasladado al vehículo médico para una evaluación detallada. El equipo enfatizó que la salud del piloto es lo más importante y que solo será autorizado para competir si los médicos lo consideran apto.
El incidente también generó incertidumbre respecto a la reparación del FW46, que sufrió graves daños en el accidente. Williams ya enfrentaba dificultades logísticas debido a los costos elevados por reparaciones en lo que va de la temporada. Se estima que la escudería ha gastado alrededor de 9,5 millones de dólares en reparaciones, con 4,8 millones solo en el Gran Premio de Brasil.
Este accidente marca el cuarto incidente de Colapinto en la Fórmula 1, luego de percances previos en el circuito de Bakú y en el Gran Premio de San Pablo, donde también sufrió accidentes durante la clasificación y la carrera. Estos contratiempos han incrementado la presión sobre Williams, que ya atraviesa una temporada complicada por el límite presupuestario y la escasez de repuestos.
El jefe del equipo, James Vowles, había advertido previamente sobre las dificultades logísticas derivadas de los daños sufridos en los choques anteriores. Con la carrera en Las Vegas programada para el domingo, la escudería tiene poco tiempo para decidir si Colapinto podrá tomar parte en la competencia, dependiendo tanto de la evaluación médica como del trabajo contrarreloj de los mecánicos para reparar el monoplaza.