Carlos Tevez vivió una particular noche en la goleada de Boca 6-0 ante Alvarado: el Apache, de 34 años, comenzó siendo suplente, aguardando desde el banco mientras Mauro Zárate, Edwin Cardona y Ramón Ábila destrababan el duelo por Copa Argentina. En el gol de Wanchope, por ejemplo, varios futbolistas se acercaron a él para compartir el festejo. Luego, Carlitos ingresó en la segunda etapa y convirtió de penal (se lo cedió Cardona) el último tanto de la goleada.
"No soy la primera opción para el director técnico, pero voy a sumar desde donde me toque. No me veo titular contra Libertad (por Copa Libertadores), aunque voy a apoyar desde afuera como siempre, porque lo importante es que le vaya bien a Boca", declaró en diálogo con TyC Sports luego del encuentro.
Sin embargo, el diálogo siguió rondando su flamante condición de suplente. Por ejemplo, el festejo "dedicado" a su figura. "Para mí es importante en este momento", aceptó. Ante las consultas circulares, el atacante ex Juventus y Manchester City comenzó a inquietarse, más allá de que no dejó de responder a la requisitoria.
"¿Por qué hay otros jugadores mejores posicionados? Eso hay que preguntárselo al director técnico; yo como siempre, cada vez que me toque, voy a hacer todo lo posible para que Boca gane", continuó. Pero una nueva pregunta al respecto lo hizo reaccionar. Con humor y algo de incomodidad. "Estás pesado, cómo estás con eso, eh", le dijo al periodista Diego Díaz.
La situación para el ídolo, ante la llegada de refuerzos de renombre como Mauro Zárate y el buen nivel mostrado por el colombiano Sebastián Villa, es poco común para un jugador como Tevez. Habrá que ver cómo continúa la situación si Guillermo Barros Schelotto sostiene su idea de darle minutos desde el banco.
"Tuve una pretemporada como quería, no falté a ningún entrenamiento. En la medida que vaya teniendo oportunidades voy a demostrar que estoy bien", concluyó.