Ni bien finalizó la actividad oficial en 2014, Boca puso manos a la obra y levantó todo el campo de juego. Trabajos en el drenaje y nuevo pasto para la Bombonera, buscando mejorías tras las lluvias que complicaron el estado del estadio en 2014. Y de a poco se van viendo los progresos.
Es que la cancha ya está totalmente cubierta por el verde céséd y se espera que esté optima para cuando Boca regresa de la pretemporada en Tandil y encare la recta final para la competencia decisiva.