Luego de concretarse su salida de Patronato, donde tuvo un gran paso, Sebastián Ribas se convirtió en el flamante refuerzo de Lanús, club con el que firmó un contrato por tres temporada.
El Vikingo no renovó su vínvulo con el Patrón y se despidió de su gente a través de una carta que se publicó en las redes sociales. Posteriormente, el Granate le compró el pase del atacante charrúa al Karpaty de Ucrania. Así, el equipo de Carboni consigue a un goleador, una búsqueda que inició por la salida de José Sand, a fin del año último.
Ribas se suma entre los refuerzos a Jorge Pereyra Díaz, de Johor de Malasia, y Lucas Mugni, de Everton de Chile. En tanto, Iván Marcone se fue a Cruz Azul de México. También el Grana quiere a Omar Alderete, defensor de Gimnasia, y Fernando Amorebieta, de Independiente, pero lo del zaguero venezolano resulta muy complicado.
En el próximo semestre, Lanús jugará el torneo local, la Copa Argentina y la Copa Sudamericana.
En los últimos días, medios de la ciudad de La Plata anunciaban que Gimnasia y Esgrima, uno de los interesados por el uruguayo, ya daba por descartada la posibilidad de contratar al ex jugador del Rojinegro.