No fue un resultado más. Lejos está de serlo, más allá que se trata de un partido de verano. Sin embargo, hay antecedentes que marcan que un mal resultado en el Superclásico puede condicionar la estadía de un entrenador. Éste no es el caso de River, aunque sí quedaron serias secuelas luego del 5 a 0 que Boca le propinó en Mendoza.
En lo que concierne únicamente al equipo, el entrenador del Millonario decidió borrar de la titularidad a Jonatan Maidana y Ariel Rojas, quienes fueron reemplazados por Germán Pezzella y Gonzalo Martínez. Esto, de cara al partido de Ida ante San Lorenzo, por la Recopa Sudamericana (el viernes, en el Monumental).
En la previa al entrenamiento de hoy, hubo una charla muy caliente, la cual por momentos fue en un tono elevado. Los que hablaron son los principales referentes del plantel: Fernando Cavenaghi, Marcelo Barovero, Gabriel Mercado y Leonardo Ponzio. El resto, escuchó. No hubo discusiones, sí posturas encontradas; aunque todos reconocieron que lo que sucedió en Mendoza no puede volver a pasar.
Luego de esto, el que tomó la palabra fue Gallardo; aunque el entrenador tuvo charlas individuales y no un diálogo grupal. Habló con Teófilo Gutiérrez, Carlos Sánchez y Leonel Vangioni, a quienes le dio un ultimátum. ¿Qué significa esto? Que serán titulares ante San Lorenzo, pero que podrían perder su puesto en el caso que se repita la conducta que tanto molesto al técnico. ¿Y cuál fue? En el colombiano, la displicencia y la indisciplina; en el mediocampista uruguayo, su inmadurez para hacerse expulsar; y en el lateral, su constante juego brusco.
Hasta hace sólo algunos días, River navegaba por aguas tranquilas; sin embargo, las derrotas ante Boca, por el resultado y las formas, alteraron el panorama. Sin dudas, los dos partidos ante San Lorenzo serán cruciales para determinar si todo volverá a tranquilizarse o si este momento se agudizará.