Para Real Madrid era la gran oportunidad de estirar la diferencia en la Liga. Y justo antes del derby ante el Aleti que se jugará en el Calderón. Pero enfrente tenía un rival bravo: el Sevilla legaba al Bernabeú en la cuarta ubicación y con la chance de acortar diferencias para seguir a tiro.
A los 11 minutos, cuando el juego era parejo y el local no había podido acomodarse ante la fricción constante que imponía su rival, un centro cruzado de Marcelo, con rosa, ideal para la entrada de los atacantes. Y el que apareció por el lado opuesto fue James Rodríguez, el colombiano se tiró de palomita y abrió la cuenta.
Lo más difícil ya estaba hecho pero el Madrid seguía padeciendo el partido, demasiado cortado para su idea de traslado de pelota. Sevilla se cargó de amarillas en un primer tiempo que fue muy accidentado. James y Ramos dejaron la cancha por sendas lesiones y encendieron la alarma pensando en el clásico ante el Aleti de Simeone. También se lesionó Beto, el arquero de Sevilla, tras un tremendo choque con Benzema.
Jesé entró en lugar del ex mediocampista Banfield y fue el que puso su sello para el 2-0. A los 35 minutos, Isco manejó los hilos por el medio, abrió para la derecha para Benzema, que quiso devolver la pared, pero la pelota quedó larga y derivó en Jesé. Derechazo fuerte y a cobrar.
El segundo tiempo fue más parecido al encuentro esperado. Sevilla bajó el ritmo y ya no pudo cortar tanto el juego. Así se soltó un poco más Isco, se juntó más con Kroos y controlaron el juego lejos del arco de Casillas. Pudo haber ampliado la cuenta Jesé con un derechazo de atropellada que dio en el palo, también lo tuvo Isco, pero Rico, el arquero que reemplazó a Beto, le sacó el mano a mano.
Y a 10 minutos del cierre, cuando todo parecía tranquilo, llegó el descuento del Sevilla que le puso suspenso al final. Enorme jugada de Vitolo por la izquierda, llegó hasta el fondo desparramando jugadores del Madrid y tocó al medio para que Aspas toque al gol.
Con este triunfo, Real Madrid alcanzó los 54 puntos y le sacó cuatro al Barcelona, su único escolta. Con 47, en la tercera ubicación, está Atlético de Madrid, su rival del sábado, en el clásico de la ciudad. Y cuarto sigue Sevilla, con 42.