Racing venció a Central en Rosario por 3-0 y dio un paso inmenso para coronarse campeón después de 13 años de espera. La Academia puede coronarse hoy mismo si River y Lanús no logran ganar, o dependerá de si mismo en la última fecha: le bastará con ganarle de local a Godoy Cruz.
En los primeros 20 minutos la pasó muy mal Racing, porque le costaba agarrar la pelota y se vió avasallado por el ímpetu de los pibes de Central. Antes del minuto avisó Cervi con un remate que se fue apenas por arriba y Barrientos probó los reflejos de Saja. Pero la más clara fue sobre el cuarto de hora cuando el Chino voló con mano cambiada para sacar un potente remate del propio Cervi, que tenía destino inexorable de gol.
La Academia comenzó a levantar de a poco, de la mano de Videla, quien tomó más contacto con el balón y con él descansó su equipo. Bou avisó con un remate que se fue apenas afuera y, ya con el trámite equilibrado, a los 42 Gastón Díaz, en clara posición adelantada, aprovechó el rebote en el palo de un tiro de Videla y tocó al gol. Un premio excesivo, pero...
En el complemento Racing arrancó mejor, pero los dos repartieron chances y a los 20, después de que Gómez Andrade se comiera el empate en la boca del arco, Bou habilitó a Milito, quien desairó a Caranta y tocó al gol.
Con el 2-0 el juego estaba absolutamente sentenciado, porque Central no tenía más nafta, pero faltaba la frutilla del postre. Militó volvió a quedar mano a mano contra Caranta y esta vez definió diferente, pero con la misma categoría, de derecha contra un rincón para bajar el telón.