Guillermo Vilas cumple 70 años este miércoles. Como ocurre con toda estrella de talla mundial, no podían faltar los saludos en las redes sociales para el gran Willy. Un momento esperado. Hubo dedicatorias de todos los estilos para el ganador de 64 títulos ATP y 4 Grand Slam (Roland Garros, US Open y Abierto de Australia en dos ocasiones).
Pero uno de los que más llamó la atención de los usuarios en las redes fue el de su mujer. La tailandesa Phiangphathu Khumueang?, su gran compañera, posteó tres fotos en su cuenta de Instagram deseándole feliz cumpleaños a la leyenda argentina.
Cerca del mediodía apareció la primera imagen. Fue la de una torta con el número 70 y la leyenda: "Feliz cumple al 1, Guillermo Vilas" con varios emoticones de corazones rojos y aplausos. La gente no tardó en dejar sus saludos para el mejor tenista argentino de la historia.
En las otras dos imágenes, ya en un tono mucho más familiar, se pueden ver a su esposa en el centro y a sus 4 hijos: Andanin (18 años), Lalindao (12), Intila (11) y Guillermo Vilas Jr, el único varón de apenas 5. Todos con una remera con la leyenda "We love to win" (Amamos ganar).
Por supuesto que la entrega de amor para el ídolo argentino no quedó ahí. Muchos usuarios quisieron dejar su mensaje. "Feliz cumple Willy querido. 70 años. ¡Sos un orgullo y una leyenda!", le escribió un internauta en la misma tónica de felicidad.
"Feliz cumpleaños al más grande de todos los tiempos", comentó otra persona con varios emoticones de corazones y tortas de cumpleaños. Haciéndose eco de los integrantes de la foto, alguien escribió: "Hermosa la familia del genio de Guillermo".
Guillermo Vilas se casó a los 50 años con la tailandesa Phiangphathu Khumueang, tres décadas menor que él. Se conocieron en un shopping de Bangkok y ella lo eclipsó al instante.
Pero, ¿qué fue a hacer el gran Willy a Tailandia en aquel momento? "Había probado todo. Se había terminado el circuito de veteranos que para nosotros era un cable a tierra. Cuando ese circuito desapareció muchos de mis compañeros estaban desaparecidos y yo me sentía perdido. Porque yo haciendo ese circuito jugaba 25 semanas al año, llevaba mucho tiempo y me divertía mucho hacerlo. De repente eso se terminó y es como que me desordenó la vida y a la vez me aburría", comentó Vilas cuando le preguntaron sobre este tópico en una entrevista.
Y agregó: "Es difícil de explicarlo, pero no encontraba razón a mi vida. Con el circuito yo tenía una vida más o menos armada, sin él se me desordenó, es como que me quedé sin eje y necesitaba otro eje por donde girar".
"Entonces fui a Tailandia y allí conocí a mi mujer y ahora tengo una hija y una nueva vida, que me hace muy feliz, con una familia", finalizó. Claro, luego fue papá de otras dos mujeres y de un varón.
Pero cuando cruzaron sus miradas, además de la notoria diferencia de edad, algo llamó la atención del propio Vilas. "Cuando nos conocimos, ella no sabía quién era. Creía que era leñador y que tenía muchas vacas. Hasta que me vio los zapatos y ahí se dio cuenta de que no era leñador", dijo sobre aquel encuentro de 2000 con Phiang, cuyo nombre significa "La Bella Mar".
Vilas estaba seguro que no iba a ser un soltero que disfrutara la vida al estilo playboy por siempre. En algún momento iba a sentar cabeza. Y aquel encuentro en el país del Sudeste Asiático con esta joven bella fue determinante para su futuro.
"Ninguna de mis relaciones fue tan fuerte como para que durara. Me encantan los chicos, pero para tener los míos primero tengo que encontrar a la mujer que sea la madre, y eso no es fácil", dijo un tiempo antes de contraer matrimonio.
El 16 de mayo de 2005 en la parroquia Nuestra Señora de las Mercedes, en el barrio de Belgrano, después de pasar por el registro civil y por la embajada tailandesa en Buenos Aires, Guillermo Vilas y Phiangphathu Khumueang se casaron. Dos años antes había nacido Andanin, quien también es tenista, en París. Con el tiempo llegó Lalindao, Intila y Guillermo Vilas Jr.
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