Claudio 'Chiqui' Tapia salió de Casa Rosada satisfecho. El presidente de la AFA, tras una reunión con integrantes del Gobierno Nacional, había logrado uno de sus objetivos, que era garantizar el regreso de los entrenamientos en la máxima categoría del fútbol argentino. El lunes 10 de agosto, los equipos de Primera (masculinos y femeninos) y Tigre podrán retomar los trabajos. "Hoy es un día muy importante", aseguró.
"Fuimos a la reunión con una postura de que el 10 solo empezaran los de la Copa Libertadores. Pero nos llevamos la sorpresa de que vuelven todos. Esto demuestra la buena predisposición del Gobierno", afirmó Tapia, que se reunió con el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero; y los ministros de Salud y Deporte, Ginés González García y Matías Lammens, respectivamente.
<blockquote class="twitter-tweet"><p lang="es" dir="ltr"><a href="https://twitter.com/hashtag/Institucional?src=hash&ref_src=twsrc%5Etfw">#Institucional</a> Imágenes ? de la reunión desarrollada hoy en la Casa Rosada de la que participaron Santiago Cafiero, Ginés González García, Matías Lammens; y las autoridades de esta Casa encabezadas por el Presidente, Claudio Tapia, y Víctor Blanco, Secretario General. <a href="https://t.co/CNtUxAABDr">pic.twitter.com/CNtUxAABDr</a></p>— AFA (@afa) <a href="https://twitter.com/afa/status/1290782384493940736?ref_src=twsrc%5Etfw">August 4, 2020</a></blockquote> <script async src="https://platform.twitter.com/widgets.js" charset="utf-8"></script>
Con la fecha de los entrenamientos ya confirmada, el próximo paso de la AFA es definir cuándo podrá comenzar la competencia. En una entrevista con TNT Sports, Tapia dejó una puerta abierta para el mes que viene: "No sería una locura poder empezar el torneo de la Liga a fines de septiembre", aseguró. Todo dependerá, está claro, de cómo avance el coronavirus.
Para la vuelta de los entrenamientos se aplicará un estricto protocolo, similar al modelo alemán que permitió la vuelta de la Bundesliga, primera Liga importante en regresar (lo hizo el 16 de mayo, luego de 46 días de suspensión) que indica entre otras cosas una fase inicial de no más de seis jugadores por turno de entrenamiento, que podrían repartirse entre las distintas canchas de los clubes. Los futbolistas deberán trasladarse en sus vehículos, tendrán que llegar cambiados desde sus casas y no podrán utilizar vestuarios ni zonas comunes de los clubes.