El DT de River Plate, Martín Demichelis, realizó una fuerte autocrítica luego de perder anoche con Vélez Sarsfield (0-2) en la Copa de la Liga Profesional, al asumir que la actuación en Liniers fue "uno de los peores partidos" de su ciclo en el club.
El entrenador aceptó que River estuvo "totalmente desconocido", se reconoció como "el primer responsable" y prometió "trabajar y corregir errores" para el siguiente compromiso, que será en dos semanas ante Arsenal, en el Monumental.
"Fue uno de nuestros peores partidos, sino el peor desde que asumí. Me voy preocupado, hay que trabajar para buscar soluciones lo más rápidamente posible", dijo DT, sin vueltas, tras la caída en la lluviosa noche de Liniers.
River, vigente campeón del fútbol argentino, sufrió la segunda derrota en tres partidos en la Copa LPF, en la que había debutado con un revés ante Argentinos Juniors en La Paternal.
"Soy el primer responsable y me tengo que poner a buscar cómo salir de esta situación, investigaré cómo salir de este momento. Tenemos dos semanas para trabajar e ir corrigiendo errores", planteó.
Consultado por los cambios en la formación inicial, algunos sorpresivos, Demichelis matizó: "Cuando se pierde en fútbol, siempre el mejor jugador está afuera. Más allá de que tengo un grandísimo plantel e independientemente de quién pueda entrar, la solución no puede estar siempre en el banco".
El DT de River inició el juego en el José Amalfitani con Esequiel Barco, Manuel Lanzini e Ignacio Fernández entre los relevos y apeló a ellos en el segundo tiempo.
"Debe haber sido el peor primer tiempo de mi gestión. Recién mejoramos cuando estuvimos 2-0 abajo en el marcador y creamos muy poco de juego. Tenemos mucho para analizar y corregir", admitió.
Finalmente, el entrenador envió un mensaje a sus jugadores ante la pregunta de una posible desmotivación por haberse quedado solamente con la competencia en la Copa LPF: "Estamos en una institución donde no se puede no tener ganas. Si alguien no tiene ganas es gravísimo, pero es algo que no está pasando en este plantel".
Tras coronar la pasada Liga Profesional con brillantez, River sufrió dos duros golpes como las eliminaciones en la Copa Argentina y la Copa Libertadores, que era el principal objetivo del club en el año.