Mientras la acción de la Súper final de la Libertadores se traslada a Madrid junto con los planteles y los hinchas, en la Argentina todavía siguen las consecuencias judiciales de lo que se vivió el sábado del escándalo en Núñez. El martes fue identificado uno de los que impactó con un proyectil al micro de Boca y ahora se develó cómo seguirá la historia de la mujer que había escondido bengalas en la ropa de su hijo para poder ingresar al Monumental.
Si bien en principio se hablaba de una pena de dos años y ocho meses de prisión en suspenso, la mujer finalmente no será condenada. Accedió a una probation y, durante los próximos tres años, no podrá acudir a la cancha con sus chicos (tiene cuatro). Además, según confirmó su abogado Carlos Broitman tendrá que hacer tratamiento psicológico y realizará tareas comunitarias.