Manchester United ganó un clásico infartante ante el City revirtiendo un marcador adverso en apenas cinco minutos sobre el final, con una polémica incluida. Los dirigidos por Erik ten Hag llevan nueve victorias en fila entre las diferentes competencias y se ubicaron como serios contendientes a dar batalla por la corona de la Premier League, un título que no ganan hace una década.
Después del tumultuoso paso de Cristiano Ronaldo, el plantel se acomodó a punto tal que afianzó un invicto sin contar con el portugués. Este emocionante triunfo en el derby tuvo a Bruno Fernandes como una de las estrellas, pero una declaración que dio segundos después de llevarse los tres puntos desató una nueva tormenta sobre Old Trafford.
"Solíamos ser individualistas, ahora somos un equipo. Puedes ver un verdadero equipo que trabaja el uno para el otro", expresó uno de los referentes a los micrófonos de BT Sports. Rápidamente en redes sociales interpretaron ese mensaje como una crítica que buscaba erosionar la figura de CR7, quien tuvo muchos problemas con el entrenador y la directiva en este último paso por Manchester.
El mediocampista portugués, que ya había quedado envuelto en una polémica con Cristiano durante el Mundial de Qatar, decidió utilizar sus redes sociales para desmentir que sus palabras fueran dirigidas a su ex compañero en United y compatriota. "Gracias a los que publicaron las palabras exactas que dije. Sé que es difícil ver al Manchester United haciendo las cosas bien y no hay nada que hablar de nosotros en las noticias más que las cosas buenas. ¡No usen mi nombre para atacar a Cristiano!", firmó en una storie de su cuenta de Instagram para intentar apagar el nuevo incendio.
"Cristiano formó parte del equipo durante la primera parte de la temporada y como he dicho en muchas entrevistas, desde el Liverpool todos están siendo increíbles y actuando como un equipo de verdad, y se pueden ver los resultados. ¡Seguimos adelante!", agregó.
El jugador de 28 años, que atraviesa su cuarta temporada con los Diablos Rojos, se refería al triunfo 2-1 contra el Liverpool que se desarrolló en la tercera fecha de la Premier League y marcó la recuperación del equipo tras comenzar el certamen con dos derrotas en fila. Desde entonces, los de ten Hag sólo cayeron en 2 de los 16 juegos que disputaron por el torneo doméstico.