Sergio Daniel Palacios
Entre la ausencia de una comunicación efectiva (desinformación) y los formatos de disputa del básquet argentino, Capuchinos de Concordia se salvó del descenso gracias al ascenso de Central Entrerriano.
A pesar de que este breve informe intentó buscar en los 84 artículos del Torneo, también en el Formato de Disputa del TFB 2018/19 y demás boletines publicados por la organización, no pudimos tener en claro cuál es la regla específica que impide el descenso de un equipo, cuando en paralelo, asciende otro (equipo) de la misma provincia (o Federación). Pero lo importante es que esa reglamentación existe. Quienes siguen de cerca el TFB lo sabían. Pero solo algunos. La noticia de la continuidad de Capuchinos sorprendió a más de uno. Incluso, a hinchas del elenco concordiense.
En Agosto de 2018, previo al inicio de la última temporada, se llevó a cabo una reunión en el Club Atlético Tala con los presidentes de los clubes entrerrianos participantes del TFB donde todos quedaron de acuerdo en pedir un descenso para la zona Entre Ríos. Esa noticia fue publicada por este sitio y muchos otros. En una misiva, directivos de nuestros clubes hicieron un pedido con varios puntos ante la CABB, entre los cuales, estaba el sistema de descensos que requería al menos, el descenso para un club de la División Entre Ríos.
Indudablemente, el pedido tuvo una respuesta a medias: Capuchinos descendió en la cancha tras perder la promoción ante Ferro, pero se salvó gracias a una reglamentación que se encontraba en la temporada anterior (2017/18). Claramente, el sistema de comunicación en cuanto a este punto del reglamento fue deficiente. Letra chica de los reglamentos. Información que no circuló masivamente. Siguiendo con nuestra búsqueda, este incompleto informe tampoco tampoco encuentra noticias tras el descenso de Capuchinos que hagan referencia a su posible salvación si posteriormente, un club entrerriano lograba el ascenso.
Paradójicamente, el básquetbol, la disciplina popular que más ha crecido y evolucionado en el deporte argentino en los últimos 30 años, contiene lógicas muy discutibles en cuanto a su organización de campeonatos: Desde las tradicionales compras y ventas de plaza e invitaciones que no premian el mérito deportivo conseguido en cancha hasta las decisiones insólitas como esta: Mantener en la categoría un club como Capuchinos que descendió en un mano a mano contra Ferro de Concordia (Por el simple hecho de que otro equipo de la misma provincia -Central Entrerriano- haya ganado el ascenso), a simple vista parecen quitarle seriedad a la competencia
Algunos amantes del básquet argumentan que la Liga Provincial pierde jerarquía temporada tras temporada por la pérdida de clubes (1 ascenso por año y un sistema de descensos muy raro en la categoría superior). En mi opinión, no sería tan problemática la situación de la Liga Provincial ya que muchos clubes entrerrianos trabajan muy bien y sobra materia prima (jugadores). Lo preocupante, es cuando las reglas de juego no son claras.
Cuando el único interés de una entidad es sumar equipos como sucedía en los viejos y desaparecidos torneos Argentino B y C de fútbol, la competencia pierde seriedad y prestigio. Y también respeto para otros clubes participantes que en cancha obtuvieron un resultado deportivo que los hace merecedores de participar en una división nacional.
