Peligro tuvo su prueba de fuego como boxeador profesional, pero no fue como lo esperaba. El parananse cayó por puntos en decisión unánime ante Rubén Eduardo “Siru” Acosta, en una velada llevada a cabo en el Sheraton Mar del Plata Hotel, donde estuvo en juego el cetro de Campeón Sudamericano de la categoría supermediano.
Wenceslao Mansilla, de 29 años y que acusó 74,400 en la báscula, llegó con grandes expectativas a este enfrentamiento, ostentando un invicto de 10 victorias (4 antes del final), 1 empate y ninguna derrota, en el campo rentado.
Pero enfrente tuvo a un campeón que demostró por que es el dueño del cinturón en la división. Acosta, oriundo de Florencio Varela, pero radicado en Mar del Plata; con sus 36 años, un pesó de 76 kilos y un record de 29 triunfos (10 por la vía rápida), 11 derrotas (4 por nocaut) y 5 empates; desplegó toda su experiencia en el cuadrilátero para quedarse con una justa victoria.
Peligro salió a buscar la pelea desde el comienzo, se lo notó muy entusiasta pero con algunas dificultades en la distancia, achicando demasiado y sin poder darle recorrido a sus golpes.
Por su parte, el campeón mostraba mucha movilidad y se cubría bien ante los ataques del entrerriano.
El tercer asalto fue el mejor para Wenceslao que, un tanto desprolijo en la ofensiva y dejando algunas gritas en defensa, logró conectar varios derechazos que desestabilizaron por momentos a Acosta.
En el quinto round, el Siru tomó la iniciativa del combate, haciendo valer su técnica y su experiencia. Mientras, Mansilla seguía atacando, sin demasiada claridad, pero con tenacidad, haciéndose, mediante su juego fuerte e imprevisible, un rival siempre peligroso para Acosta, que no podía descuidarse y trataba de manejarla contienda.
Round a round la historia se repetía, Wenceslao buscaba espacios para entrarle al campeón pero no lo hacía de manera precisa, se encimaba mucho y eso beneficiaba a Acosta, que era más efectivo en el intercambio de golpes, controlaba las acciones y siempre cerraba bien los asaltos, haciendo crecer su ventaja en las tarjetas.
Sobre el final el campeón se soltó y llegó a asestar varios golpes con potencia y claridad. Acosta llevo la pelea de menor a mayor, imponiendo su experiencia y su astucia, mientras que Peligro no mostró en el final el mismo ímpetu que tuvo desde el comienzo.
El cierre el match fue todo del Siru, que en el ultimo capitulo sacó una diferencia clara ante el paranaense, logrando un triunfo por puntos en fallo unánime, con tarjetas que marcaron 116-112,118-111 y 116-111 a su favor, para poder soltar la alegría ante su público que lo ovacionó por retener el cetro en su cuarta defensa.
Una derrota digna de Wenseslao Mansilla, que fue superado por un rival de renombre y experiencia, pero que demostró que tiene mucha garra y un potencial enorme para el futuro.