Paolo Guerrero rompió el silencio en Brasil, luego de que se conozca la sanción de un año recibida tras el doping positivo detectado luego del partido de su Selección ante Argentina del 5 de octubre. El delantero dialogó con el programa brasileño Fantástico y afirmó: "Es muy fuerte hablar de dopaje. Mi resultado no fue positivo. La sustancia tiene algunos componentes, pero no es cocaína".
"Cuando comenzó el proceso de investigación, la FIFA me castigó por 30 días, me pareció muy apresurado e injusto", agregó el delantero incaico.
Por último, Guerrero aclaró que tomó "un té que me recomendaron para tratar la gripe, y antes había tomado uno de anís para la indigestión en Perú. No consumí ninguna droga, hace 17 años soy profesional y nunca lo hice. Está confirmada la contaminación. Me dañaron profesionalmente"