Después de las dos contundentes derrotas que había sufrido como visitante, Cleveland necesitaba enviar un mensaje y lo dio de la mano de James, dueño de una planilla completa con 32 puntos, 11 rebotes y seis asistencias, e Irving, que aportó 30 unidades y ocho asistencias.
Entre ambos suplieron la ausencia Kevin Love, aún no recuperado de la conmoción cerebral que sufrió en el segundo partido por un golpe de Harrison Barnes. Además, el escolta J.R. Smith completó un gran juego con 20 puntos.
El mérito de Cleveland fue neutralizar a Stephen Curry y Kay Thompson, marcaron tan solo 29 puntos entre los dos. El jugador más valioso de la temporada llegó a la primera mitad con apenas dos puntos, fruto de la intensa marca de los Cavaliers, que dominaron las acciones desde el comienzo y se imponían 33-16 al final del primer parcial.
La pequeña reacción de Golden State en el segundo cuarto alcanzó para cerrar la primera mitad con ocho puntos de desventaja (51-43), pero nunca fue una amenaza real para Cleveland.
A pesar de que Curry acercó 13 de sus 19 puntos en el tercer cuarto, los locales sentenciaron el partido en ese segmento, con un contundente 38-26, que les dio una renta de 20 puntos para ingresar al cuarto periodo.
Como Golden State no consiguió achicar la desventaja rápido, el partido se definió de manera prematura cuando restaban seis minutos y los dos entrenadores colocaron sus alineaciones de reserva para completar el juego.
El cuarto partido, previsto para el viernes, volverá a disputarse en el Quicken Loans Arena de Cleveland.