Josito Di Palma, que largó cuarto y con gomas para piso seco en su Ford, cosechó la segunda victoria en la temporada con el auto que alista el equipo Maquin Parts; atrás terminaron otros dos usuarios de la marca y que también optaron por neumáticos lisos: el uruguayo Mauricio Lambiris y Valentín Aguirre, que partieron sexto y noveno, respectivamente.
El campeón Mariano Werner (Ford) arribó octavo y abrió a 16,5 puntos la brecha en la Copa de Oro sobre el piloto oriental, que para convertirse en campeón está obligado a ganar el 5 de diciembre en Villicum, San Juan, donde el TC desandará el Gran Premio Coronación.
Werner hizo una carrera inteligente porque esperó en pista que las condiciones sean óptimas para dar pelea y tal es así que desde el 8º giro empezó a ganar colocaciones y avanzó posiciones. Además, en ningún momento arriesgó más de la cuenta, ya que Christian Ledesma (Chevrolet), Juan José Ebarlín (Chevrolet), entre otros le presentaron lucha y optó por llegar en el puesto que finalmente culminó.
Lambiris, que cumplió su 100ª carrera en Turismo Carretera, también se marchó feliz: avanzó en la clasificación, es el nuevo escolta de Werner en la Copa de Oro y se ilusiona con el título.
El auto no venía bien: <i>"Es fácil echarle la culpa a la goma [corrió con neumáticos lisos], pero pusimos todo y no tuvimos la contundencia de las últimas carreras. Sí, nos sirvió para llegar"</i>, expresó Mariano Werner, el piloto que más veces triunfó en Toay.
Pero para beneficio de Werner, peor resultó la cosecha de Agustín Canapino, de Chevrolet, que llegó como escolta a Toay pero falló en la elección de los neumáticos y tras largar quinto finalizó 35º; ahora lo separan 37,5 unidades del campeón.
Werner suma 150,5 puntos, seguido por Lambiris con 135, Canapino con muy pocas chances ya tiene 114 unidades y Ledesma aparece con 111,5. La definición será el 5 de diciembre en el autódromo de El Villicum de San Juan.