Si bien hacía algunas semanas atrás ya se oía desde las oficinas de la entidad de Liniers que algunos jugadores no continuarían luego de junio por sus altos contratos, una gran sorpresa resultó el 'borrón' antes de tiempo. Fue en la previa del compromiso ante Arsenal cuando el Sebastián Sosa estalló por intermedio de las redes sociales y anunció que no jugaría más en Vélez por decisión de la dirigencia (pese a que después el presidente responsabilizó al técnico por la determinación y no hizo más que embarrar la desprolija salida del arquero).
Y ahora se sumó un nombre más a la lista negra, sin sorprender tanto por la situación que venía atravesando la pasada semana. Se trata de Ariel Cabral, quien no sólo no formó parte de la última convocatoria sino que además había sido enviado a entrenar con la Reserva sin volver de alguna lesión.
"Unos días antes que a Sosa, pero por los mismos motivos, me avisaron que no voy a jugar más en Vélez", develó el volante en diálogo con Radio América. Mientras que agregó: "Debe ser un tema dirigencial, es bastante raro para mí. Hace muchos años que estoy en Vélez".
En tanto, al igual que el uruguayo, el mediocampista se quejó por la falta de diálogo por parte del club: "Parece que esta dirigencia se está manejando así. Estoy esperando a ver si alguien me viene a hablar... Entrenamos todos los días pero no podemos hacer fútbol. Esa es la directiva que nos dieron".
"Me duele irme así porque estuve muchos años en Vélez. Cuando Gámez volvió de España, nos separaron a mí y a Sosa. Tuvimos una reunión y me hicieron una oferta con un sueldo más bajo. Salieron a hablar del campeonato económico...", concluyó el molesto Cabral.
Tras sus palabras, Raúl Gámez alzó la voz para referirse a la situación en general: "Desde el comienzo de nuestra gestión dijimos que íbamos a bajar el presupuesto. Hay contratos muy onerosos. Nosotros apostamos que a fin de año podamos tener un equipo importante cuando tengamos ordenadas las finanzas". Y justificó: "Papa y Domínguez no se fueron por lo futbolístico, sino por los contratos que tenían".
Para cerrar, lejos de calmar los ánimos, el pope del 'Fortín' sorprendió agregando nombres la lista negra: "Pellerano y Pavone se irían, tienen contrato hasta junio por el fútbol mexicano".