El fútbol chino parece estar decidido a robarse el protagonismo arrancando por las enormes sumas de dinero que pagaron para contratar jugadores de renombre, que firmaron contratos altísimos. Una de las estrellas que aterrizó en Asia para esta nueva temporada es Ezequiel Lavezzi, que ganará aproximadamente 14 millones de euros por año de mínima.
Es que además los chinos pagan suculentos premios por partido, y ya en el debut del torneo por el triunfo del Hebei Fortune ante Guangzhou por 2 a 1 con goles de Gulum y Gervinho, cada uno de los jugadores del plantel cobró 60.000 euros.
Así, por ejemplo el Pocho, que entró a los 25 del segundo tiempo, ganó más plata por jugar 20 minutos en el fútbol chino que por consagrarse campeón de la Copa de la Liga de Francia con el PSG, donde cada jugador recibió 50.000 euros.