La Selección argentina cerró el año con un triunfo muy importante. El equipo de Lionel Scaloni derrotó 2 a 0 a Perú en la cuarta fecha de las Eliminatorias Sudamericanas y dio un paso más hacia el Mundial de Qatar 2022. Con estos tres puntos se ubicó en el segundo lugar de la tabla de posiciones con diez puntos, dos menos que Brasil, el único líder. Pero hubo algo más que potenció la victoria: la Selección ganó con autoridad.
Argentina tuvo buen juego. Porque más allá de los tres puntos, la Selección quería ganar así. Ya lo estaba conforme con ganar por poco o con sufrimiento. Este martes la victoria fue muy merecida. De hecho pudo haberlo ganado por una diferencia mayor. Casi no hubo puntos bajos.
El encuentro se disputó en el estadio Nacional de la capital peruana y a puertas cerradas, con arbitraje del colombiano Wilmar Roldán, acompañado por sus compatriotas Alexander Guzmán y Dionisio Ruiz, mientras que como responsable del VAR estuvo Andrés Rojas.
Argentina buscaba romper el circuito de juego de Perú, pero en los primeros diez minutos hubo dos jugadas que dejaron en claro que el local lograba llegar con poco. Una de las situaciones, de hecho, fue revisada por el VAR por una supuesta falta de Franco Armani dentro del área, que el árbitro, tras analizarla, decidió que no era.
<blockquote class="twitter-tweet"><p lang="es" dir="ltr">¡GOOOL DE ARGENTINA! ???<br><br>Nico González puso el 1-0 ante Perú a los 17 del PT, tras una gran jugada colectiva. ¡VAMOS CARAJO! <a href="https://t.co/1fRNwoGVQ2">pic.twitter.com/1fRNwoGVQ2</a></p>— TyC Sports (@TyCSports) <a href="https://twitter.com/TyCSports/status/1328863113639288832?ref_src=twsrc%5Etfw">November 18, 2020</a></blockquote> <script async src="https://platform.twitter.com/widgets.js" charset="utf-8"></script>
La fragilidad defensiva de Perú era una invitación para Argentina. Sabía que, en el momento en el que pudiera construir una buena jugada, el gol iba a llegar. Así fue que Nicolás González, tras una buena conexión por la banda izquierda, anotó el 1-0 con un disparo perfecto.
Argentina necesitaba un primer tiempo así, sólido, con autoridad. En ese análisis también hay una certeza: al conjunto de Scaloni le conviene enfrentar a equipos que lo salen a buscar. Algo que pasó, en parte, en el duelo de este martes, cuando los de Gareca, necesitados por los malos resultados, trataron de forzar a Argentina. Y salvo por el amanecer, a Argentina, en el primer tiempo, le alcanzó con una ráfaga.
Porque poco después Lautaro Martínez le dio más tranquilidad a la Selección, al marcar el 2-0. A todo esto, Leo Messi trataba de marcar su gol. No pudo, pero tampoco hacía falta: Argentina ganó bien, sin sufrir. Pudo, de hecho, haber sido una goleada.
<blockquote class="twitter-tweet"><p lang="es" dir="ltr">¡GOOOL DE ARGENTINA! ???<br><br>A los 17 del PT, Lautaro Martínez culminó otra gran jugada colectiva y puso el 2-0 ante Perú. ¡VAMOS CARAJO! <a href="https://t.co/YuJ2crMleX">pic.twitter.com/YuJ2crMleX</a></p>— TyC Sports (@TyCSports) <a href="https://twitter.com/TyCSports/status/1328865884715233280?ref_src=twsrc%5Etfw">November 18, 2020</a></blockquote> <script async src="https://platform.twitter.com/widgets.js" charset="utf-8"></script>
Invicto con diez puntos, Argentina viene derribando rachas adversas como ocurrió en la primera ventana, cuando volvió a ganar en la altura de La Paz tras 16 años. Desde el 4 de septiembre de 2004, por la octava fecha de las Eliminatorias rumbo al Mundial de Alemania 2006, que la Selección no ganaba en Lima.
El 1-1 del jueves ante Paraguay profundizó las dificultades de generar peligro para un equipo que intenta lograr una identidad de mucha intensidad y despliegue ofensivo que le permita usufructuar su jerarquía individual.
En lo futbolístico, Scaloni no pudo tener a Exequiel Palacios, que sufrió una fractura en la columna, pero sí recuperó a Nicolás Tagliafico en el lateral izquierdo, quien se perdió el duelo ante Paraguay por una molestia muscular. El entrenador argentino decidió mantener a Nicolás González en el equipo, pero esta vez parado casi como extremo.
Por su parte, el argentino Ricardo Gareca transita su peor momento desde que tomó a la Selección de Perú, a la que devolvió a un Mundial masculino de mayores en Rusia 2018, lo que lo elevó a la categoría de ídolo nacional. Con un punto sobre nueve posibles, y más allá de los rivales que tuvo que enfrentar, Gareca sabe que se le puede escapar el tren.