No fue un buen año para Jospeh Blatter. Tras ser reelegido como máxima autoridad del fútbol mundial, el suizo debió llamar nuevamente a elecciones por el escándalo de corrupción que estalló en FIFA. Aún aferrado a su cargo, recibió otro duro golpe: fue suspendido por 90 días, acusado de un pago irregular al presidente de la UEFA, Michel Platini.
Y, finalmente, el cuerpo parece haberle pasado factura a Blatter que recientemente quedó hospitalizado, tras realizarse diversos chequeos médicos por dolencias relacionadas con el estrés.
El presidente de la FIFA tiene 79 años y ya se encontraba haciendo reposo en su casa tras sufrir un shock nervioso. Se estima que estará bajo observación por 10 días.