Desde que se dio su salida de Boca, allá por marzo de 2016, Rodolfo Arruabarrena se fue a dirigir al fútbol de Asia. Hace cuatro años que venía dirigiendo ininterrumpidamente en Emiratos Árabes -más allá de un breve paso por el vecino país de Qatar-, en donde trabajó en Al Wasl, Al Rayyan, Al Ahli y recientemente había arreglado en Sharjah FC.
Sin embargo, a poco más de un mes de haber firmado su contrato con el equipo emiratí y luego de no haber podido dirigir ni siquiera un entrenamiento debido a la pandemia de coronavirus, el Vasco fue destituido de su cargo, aunque no se irá con las manos vacías: el DT acordó con el club rescindir su vínculo a cambio de un millón y medio de dólares.
El exentrenador del Xeneize ya venía de ser despedido en marzo de este año del Shabab Al Ahli FC, equipo en el que estuvo dos años y conquistó dos títulos. No obstante, en esa oportunidad su salida se debió a una decisión deportiva, mientras que en este llamativo caso se debe a un cambio de dirigencia en el Sharjah.