Independiente, con varias bajas por citaciones a selecciones y lesiones, empató 1 a 1 en Victoria ante Tigre, que mereció más que esa paridad en el balance de los 90 minutos del partido que cerró en su cancha la 20ma. fecha de la Superliga.
Con este reparto de unidades los "rojos" llegaron a los 36 puntos y están quintos, siendo los últimos que están ingresando a la Copa Libertadores 2019, apenas una unidad por encima de Racing, mientras que los de Victoria rebasaron en la tabla de promedios a Vélez Sarsfield, que es el conjunto anterior en las ubicaciones a los cuatro que están perdiendo la categoría: Olimpo, Temperley, Arsenal y Chacarita (se enfrentan la próxima).
Tigre se hizo fuerte en el primer tiempo utilizando su novel entrenador, Cristian Ledesma, las mismas herramientas futbolísticas que esgrime habitualmente su colega del "rojo", Ariel Holan, vale decir presión alta, circulación prolija sin exagerar la centralización, y búsqueda constante por los costados haciendo pesar siempre la superioridad numérica en esa región de la cancha.
Por su parte Independiente, al que le pesaron las cinco ausencias de titulares como el arquero uruguayo Martín Campaña y su compatriota Gastón Silva (no había jugado los últimos partidos por lesión), el lateral derecho Fabricio Bustos y el volante ofensivo Maximiliano Meza (los cuatro convocados a sus seleccionados nacionales), junto a Martín Benítez, con una afección muscular, "sufrió" el desarrollo de esa etapa.
Es que el "Matador" fue siempre superior, manejó los tiempos del partido y llegó con claridad en cuatro acciones manifiestas de gol, dos de ellas con el ex Independiente Federico González como protagonista, una estrellándose contra el palo derecho del arco defendido por el veterano Damián Albil.
<iframe src="https://api.vodgc.net/player/v2/embed/playerId/PQYJ7P1510330862/contentId/503608?autoplay=false&external_playlist=503618,503621,503573,503568,503456,503328,503280,503274,503157" frameborder="0" allowfullscreen width="650" height="390" scrolling="no"></iframe>
A los de Avellaneda les faltaba frescura para atacar y chispa para generarle posibilidades a dos delanteros importantes como Emmanuel Gigliotti y Silvio Romero, sobre todo porque su usina generadora de juego esta noche era el ecuatoriano Fernando Gaibor, que fue absorbido por la marca del intenso Sebastián Prediger.
Solamente una vez lo perdió el ex Colón, Belgrano, Estudiantes de La Plata y Boca Juniors a Gaibor, y eso le resultó fatal a los locales, porque además se equivocó el árbitro Fernando Rapallini al no cobrar un ajustado pero claro offside de Silvio Romero que sobre la media hora el ex Lanús transformó en la apertura del marcador para la visita.
Una pérdida en tres cuartos de cancha de Tigre encontró a Gaibor libre en el círculo central para habilitar a un Romero que estaba un metro adelantado y definió alto, superando a Julio Chiarini y convirtiendo su primer tanto con la camiseta roja.
El cuarto de hora final del primer período no varió las características del partido pese al gol, sino que por el contrario las acentuó, y las prolongó inclusive por el mismo lapso de tiempo inicial de la etapa final.
A partir de entonces fue cuando por primera y única vez en la noche de Victoria el conjunto visitante logró hacer pie en el encuentro, jugando en gran medida con la desesperación de un Tigre que se sentía afectado por la doble injusticia de una derrota que no merecía y la forma en que esta se había producido.
<iframe src="https://api.vodgc.net/player/v2/embed/playerId/PQYJ7P1510330862/contentId/503621?autoplay=false&external_playlist=503618,503608,503573,503568,503456,503328,503280,503274,503157" frameborder="0" allowfullscreen width="650" height="390" scrolling="no"></iframe>
Pero apenas superados los 20 minutos el "Lobo" Ledesma apeló a una variante que le devolviendo el protagonismo al dueño de casa, ya que sacó a un impreciso y poco participativo "Cachete" Morales para poner en su lugar a un vertiginoso Lucas Janson, que en vez de cerrar la cancha como hacía su reemplazado, con lo que terminaba cayendo en el embudo defensivo de Independiente en la media luna, abrió la cancha.
Lanzado permanentemente por izquierda el olavarriense también abrió la última línea de los visitantes y por allí llegó al empate el conjunto azulgrana, que lo logró con un sello de ese incipiente estilo que quiere caracterizarle al equipo su entrenador.
Una sucesión de toques de primera con algún doble toque en el arranque de la jugada terminaron con Federico González cumpliendo con la inexorable "ley del ex" para batir con un tiro bajo a Albil y barnizar de un poco de justicia al resultado.
Azuzado por la paridad Tigre fue por lo que realmente merecía, la victoria, pero no le alcanzó, aunque arriesgó y hasta se expuso a alguna contra de Independiente que le pudo resultar fatal en los píes de un Silvio Romero que fue de lo más peligroso de la noche para los de Avellaneda.