Lewis Hamilton, piloto hexacampeón de la Fórmula 1, apoyó que derriben la estatua de Edward Colston en Bristol, en Inglaterra, en el marco de las protestas por el crimen de George Floyd, quien fue asesinado a manos de la policía en Minneapolis, Estados Unidos.
"¡La estatua del comerciante de esclavos Edward Colston fue derribada! ¡Nuestro país ha honrado a un hombre que vendió esclavos africanos! Todas las estatuas de hombres racistas que hicieron dinero vendiendo a humanos deberían ser derribadas. ¿Quién es el próximo?", expresó a través de su cuenta de Instagram.
"Desafío a los gobiernos de todo el mundo a hacer estos cambios e implementar la pacífica eliminación de estos símbolos racistas", agregó, en un mensaje dirigido hacia los políticos tanto de su país como del resto del planeta.
Por otra parte, criticó a las autoridades gubernamentales por cómo manejaron la crisis sanitaria de la pandemia del coronavirus. "Estoy horrorizado con el gobierno de Reino Unido por cómo trataron el covid-19. Debieron cerrar las fronteras hace meses. Cómo pueden dejar que las personas vuelen hacia aquí desde país sin ser testeados es desconcertante. Pudieron salvar millones de vida. ¡Necesitamos mejores líderes!", expresó.
"Si esas personas no hubieran derribado esa estatua, que honra a un traficante de esclavos racista, nunca hubiera sido eliminada. Están hablando de que la llevarán a un museo. Esa estatua debería quedarse en el río, como las 20 mil almas de africanos que murieron en su viaje hacia aquí y las tiraron al mar, sin un entierro o monumento. ¡Él las robó de sus familias, países y no debe ser celebrado! ¡Debería ser remplazado con un entierro para aquellos que vendió, aquellos que perdieron sus vidas!", agregó haciendo referencia a las marchas.
Por último, Hamilton reafirmó su postura replicando un posteo de Shaun King, escritor y activista de derechos civiles: "No condono la violencia o los actos penales, pero tenías mucho tiempo para hacerlo y no lo hiciste. ¡Poder a la gente! Edward Colston era un monstruo que compraba, vendía e intercambiaba africanos, seres humanos, y los forzó a la esclavitud hasta que murieron. Nadie que hizo esto debería ser honrado. Fue / es terrorismo. Ahora. Entonces. Nunca debería haber tenido una estatua. Estoy orgulloso de los activistas y organizadores en Bristol, en el Reino Unido, que derribaron esto".