Las cartas está volcadas sobre la mesa para River. Para acceder a los octavos de final de la Libertadores necesita ganarle en la última fecha a San José de local y esperar que Juan Aurich no triunfe ante Tigres. Y luego del 2 a 2 en Monterrey, Marcelo Gallardo cree en la buena predisposición de los mexicanos, ya clasificados.
Espera que le den una manito, justamente. "Tigres no va a ir para atrás para perder. Eso me deja tranquilo. Nosotros somos los primeros comprometidos en tener que ganar. Si se puede, por más de dos goles. Y después pasa a ser importante lo qeu ocurra en Perú. Ellos están clasificados y jugarán con la necesidad del equipo peruano. Si bien no es una una superfice a la que estén acostumbrados, hará un buen partido. Va a querer seguir sumando para estar en mejor posición en la tabla general. Le tengo fe".
Retomando algunos conceptos de lo que le dejó el choque ante los mexicanos, Gallardo expresó: "No supimos encontrarle la vuelta. El gol y la lesión de Ponzio fueron golpes duros. Rogaba que terminara el primer tiempo. Ellos no tenían desesperación. Cambiamos un poco, buscando ir por los costados y profundizando por los laterales. Sobre la hora, encontramos los goles. Ayer no fuimos superiores, pero encontramos un resultado impensado. Es una señal y hay que creer en ella".
Y, una vez más, subrayó la valentía de su equipo: "Se premia a un equipo, sin respuestas futbolísticas, que mostró otra vez carácter. Una vez más, desde que soy DT, lo ha puesto de manifiesto. Después de un resultado adverso, conseguimos una ficha sobre el final. Conseguimos un punto. Habrá que ver con buenos ojos esa luz y encarar con buenas sensaciones la semana que viene".
<b>Más frases del Muñeco:</b>
"Ha sido una competencia rara desde el inicio. Nos tuvo a maltraer en muchos partidos. Sufrido. El tener cuatro empates y una derrota, no estaba en nuestros planes. No ganamos ninguno de local, mereciendo, pero sin poder. Habíamos concretado situaciones, siendo superiores, pero sin capitalizarlas. No hemos podido ganar, pero estamos expectantes".
"Más allá del empate, el grupo está con bronca. Cada uno sabe que no hicimos el partido que queríamos hacer. Está con bronca y ganas. Con esperanza y esa alternativa que nos permita empatar".
"El fútbol es dinámica de lo impensado. Entedemos que puede pasar cualquier cosa. Las posibilidades son reales y nos aferramos".
"Uno va tanteando al rotar. El algunos casos, los que jugaron el domingo, se sintió. Hubo cierta falta de energía en cuanto a querer y no poder. Al rotar, hay que evaluar. La dinámica termina haciendo la diferencia".