El británico Lewis Hamilton mantuvo su aro en la nariz previo al Gran Premio de Mónaco de Fórmula 1, luego que el organismo rector del automovilismo extendió la exención a los pilotos que usan joyas hasta finales de junio.
A Hamilton se le había otorgado una exención temporal de dos carreras para quitarse el piercing, un proceso que, según explicó, requiere una intervención quirúrgica. Eso cubrió solo el GP de Miami y el GP de España del fin de semana pasado, lo que significa que pudo haberse visto obligado a perderse la carrera en Mónaco si las reglas se hubieran aplicado de manera estricta.
La exención de la FIA también cubre Azerbaiyán el 12 de junio y Canadá el 19 de junio. Las discusiones tuvieron lugar después de la sesión informativa de los pilotos en el GP de España, con la intención de resolver cómo usar joyas de manera segura.
"Definitivamente es positivo que estemos trabajando con (la FIA) y creo que están siendo un poco complacientes en este momento'', indicó Hamilton antes de la primera sesión de práctica del viernes. Sin embargo, el británico continúa frustrado por el asunto.
"Honestamente, siento que se está dedicando demasiado tiempo y energía a esto. He dicho todo lo que creo que tengo que decir al respecto en las últimas carreras y no voy a enfocarme en eso este fin de semana'', dijo Hamilton. "No deberíamos tener que seguir revisando esto todos los fines de semana. Definitivamente tenemos peces más grandes qué freír''.
Hamilton protestó por la represión de la FIA contra las perforaciones corporales en Miami. Llegó al paddock con al menos cuatro collares apilados y luego fue visto con al menos tres relojes y cuatro anillos en cada mano, junto con sus aretes y su aro en la nariz.
La FIA endureció su prohibición de ropa interior y perforaciones corporales no reglamentarias con la regla como parte de las verificaciones oficiales, lo que significa que tales elecciones están sujetas a revisión por parte de los oficiales de carrera.