Un gesto evidente pero apelable de Carlos Tevez y las fuertes declaraciones que hizo en la conferencia de prensa post partido Ramón Wanchope Ábila pusieron a ambos jugadores en tela de juicio. Desde temprano se barajó la posibilidad de que la Unidad Disciplinaria de la Conmebol actuara de oficio y los sancionara con una multa económica y una fecha de suspensión, dejándolos afuera del Superclásico revancha. Pero, según confirmaron desde la Conmebol, no accionarán de oficio ni habrá sanción alguna para los jugadores de Boca.
Invadido por la impotencia, tras protestarle al juez brasileño Raphael Claus al final del partido, Tevez se retiró del campo de juego del Monumental haciendo la típica seña de "pagaron", mirando a los hinchas de River que estaban en la platea San Martín. Pero fue un gesto corto, de interpretación, fácilmente apelable en caso de que lo llamaran a declarar al Tribunal de Disciplina de la Conmebol. Y aparte no fue informado por el árbitro.
Al Apache, además, le abrieron una causa judicial. La fiscal Verónica Natalia Andrade le labró un acta en el vestuario por violar los artículos 103 y 105 del Código Contravencional, es decir "por incitar a la violencia y al desorden". Lo mismo ocurrió con Mauro Zárate, quien también le hizo un gesto provocativo a los hinchas de River al retirarse del campo. Los dos futbolistas de Boca serán citados a declarar y se exponen a una multa económica. El artículo 103 indica que es de 200 a 1000 pesos y de "uno a cinco días de arresto". Pero hay una aclaración: en caso de ser deportista la sanción es el doble. Por lo tanto, en lo económico sería de 400 a 2000 pesos y en lo penal de dos a diez días de arresto.
Wanchope fue un poco más allá. "Obviamente el árbitro influyó en el resultado. El penal no lo reclama nadie. Siempre hay alguien que llama. Están con crédito en el teléfono los del VAR porque llaman siempre. Se revisa todo y esto te complica, te cambia el trámite del partido, te predispone de otra manera", se quejó en la conferencia de prensa que brindó tras el partido, dando a entender que no se los juzga de igual manera. Sin embargo la Conmebol, apuntada desde hace tiempo por ciertos fallos arbitrales, tampoco intervendrá.
De esta manera, Boca no perderá jugadores de cara a la revancha del 22 de octubre en la Bombonera.