Argentina terminó el año a toda orquesta con una victoria por 1 a 0 sobre Brasil en el mismísimo estadio Maracaná que significó quitarle ese récord de 65 partidos como local sin derrotas, desde que comenzaron las Eliminatorias Sudamericanas, y lo hizo después de un comienzo escandaloso en el que los futbolistas albicelestes se fueron al vestuario en señal de protesta por las agresiones que recibieron sus hinchas de parte de la policía local.
El encuentro comenzó en medio de incidentes entre hinchas argentinos y la policía brasileña, creando un ambiente tenso que se reflejó en el terreno de juego desde el primer minuto. Un partido duro y disputado, donde a los 5 minutos, Rodrygo Goes fue amonestado por un manotazo sobre De Paul, marcando el tono aguerrido del enfrentamiento.
El primer tiempo estuvo marcado por la fricción y la falta de ocasiones claras de gol. Lionel Scaloni sorprendió con cambios tácticos, incluyendo la inclusión de Giovanni Lo Celso para presionar y poseer más la pelota. Sin embargo, la estrategia inicial no generó grandes oportunidades.
El dominio inicial perteneció al equipo local, que impuso su juego brasileño bajo la dirección de Dinis, entrenador del Fluminense. Cada intento de la Albiceleste de construir juego fue cortado por faltas tácticas que frenaban la propuesta de Scaloni. El primer tiempo estuvo plagado de infracciones, resultando en momentos de tensión y jugadores desplomados.
A pesar de la falta de claridad en los primeros minutos, la perseverancia argentina comenzó a dar frutos en la segunda mitad. Los cambios tácticos de Scaloni, especialmente la inclusión de Lo Celso, generaron conexiones con Acuña y dieron lugar a oportunidades de peligro.
A los 63 minutos, en una jugada colectiva magistral, un desvío llevó a un córner ejecutado de manera espectacular por Lo Celso. Nicolás Otamendi, el zaguero del Benfica, se elevó en el área y conectó un cabezazo imparable que colgó del ángulo, rompiendo el empate y desatando la euforia en la hinchada argentina.
Con el gol, Argentina ganó impulso anímico, mientras que el conjunto carioca mostró imprecisiones. Scaloni realizó cambios clave, dando entrada a Di María, Lautaro Martínez, Paredes y González, para consolidar la ventaja.
Al final, la Albiceleste defendió con firmeza su ventaja, logrando la hazaña de quitarle a Brasil el invicto histórico jugando como local en Eliminatorias Sudamericanas. Un clásico que tuvo de todo: tensión, emociones y, sobre todo, la consagración de Argentina en el mítico Maracaná.
<b>Formaciones:</b>
<b>Argentina:</b> Emiliano Martínez; Nahuel Molina, Cristian Romero, Nicolás Otamendi, Marcos Acuña; Rodrigo De Paul, Alexis Mac Allister, Enzo Fernández, Giovani Lo Celso; Lionel Messi y Julián Álvarez. DT: Lionel Scaloni.
<b>Brasil:</b> Alisson Becker; Emerson, Marquinhos, Gabriel y Carlos Augusto; André, Bruno Guimarães, Raphinha y Rodrygo; Gabriel Martinelli y Gabriel Jesús. DT: Fernando Diniz.
