Manny Pacquiao regresó al ring luego de más de dos años y perdió ante Yordenis Ugás. El cubano, quien realizó un gran combate pese a que hace apenas once días se enteró que enfrentaría al Pacman, se impuso por decisión unánime y retuvo su cinturón wélter de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB). Las tarjetas de los jueces marcaron 115-113, 116-112 y 116-112 a favor del caribeño en la que podría haber sido la última pelea de Pacquiao.
Si bien la pelea fue muy cerrada, el cubano se mostró muy firme con su jab que le permitió mantener la distancia y sentirse más cómodo a lo largo del combate. Por su parte, Pacquiao nunca pudo encontrar la clave para superar a Ugás.
Esas dificultades que se le presentaron al Pacman le impidieron pelear en la distancia corta, por lo que su efectividad fue demasiado baja en comparación con lo que hizo su rival. En una pelea muy cerrada, el cubano se impuso gracias a los detalles.
Lo curioso es que pese a lo mostrado por Ugás, la realidad es que tuvo menos de dos semanas para preparar este combate. Pacquiao tenía programada su vuelta para enfrentar a Errol Spence Jr., pero el estadounidense se bajó por una lesión en la retina. A raíz de eso, Ugás, quien se preparaba para combatir en la misma velada pero lo iba a hacer ante el argentino Fabián Maidana, apareció como opción.
Es que el hermano del Chino también sufrió una lesión en un entrenamiento un día después que Spence y así le abrió la puerta a Ugás para protagonizar esta histórica pelea.
A su vez, esta también pudo haber significado la última presentación de Pacquiao. El filipino, que es Senador en su país, aún no sabe qué hará de su futuro y, tras el combate, sembró más incertidumbre al asegurar que en los próximos días anunciará su decisión. Según trascendió, el asiático tendría pensado presentarse como candidato a presidente de Filipinas.