Después de dos días sin entrenarse por una deuda de varios meses, que el club mantiene con el plantel, los jugadores de Unión arreglaron con la dirigencia y finalmente decidieron arrancar con la pretemporada. El presidente Luis Spahn había confirmado que estaban cerca de llegar a un acuerdo. Por suerte, todo se solucionó y Juan Pablo Pumpido pudo comenzar con la preparación de cara a la seguna mitad del campeonato.
Los futbolistas pudieron arreglar con los dirigentes el pago adeudado de los meses de octubre y noviembre -quedará en deuda diciembre y el aguinaldo- y dieron inicio a la pretemporada en el predio Casasol. El entrenador Pumpido decidió tener una charla con los jugadores antes de empezar el entrenamiento y luego realizaron trabajos en el gimnasio.