El último domingo por la noche, Vélez cayó en Avellaneda ante Racing por 2 a 1 y, a quince minutos del cierre del partido, Gabriel Heinze tomó una llamativa decisión: reemplazó a Mauro Zárate por el juvenil Nazareno Bazán y generó enojos en el público velezano, que hoy se manifestó en el entrenamiento.
"Gringo: Estamos hasta el final con vos, ¡pero Mauro juega siempre". Eso dice el pasacalles que colgó un grupo de hinchas del Fortín en la Villa Olímpica.
El atacante llegó a Liniers a principios de año y en cinco partidos convirtió dos goles, uno ante la Academia y el anterior ante Belgrano en Córdoba.