El expresidente de Conmebol Eugenio Figueredo reconoció corrupción y "plata dulce" en el organismo rector del fútbol sudamericano, según el informe del fiscal que pidió su juicio y prisión en Uruguay.
El indagado "reconoce que al ser evidentes los manejos indebidos de dinero en la Confederación (Sudamericana de Fútbol), y por los contratos que ésta firmaba, al asumir como Presidente, procuró 'legalizar' (sic) la 'plata dulce' (sic) que se repartían" en "una red de corrupción, que lamentablemente azotó al fútbol Sudamericano, en impunidad que se ha mantenido durante décadas", escribe el fiscal Juan Gómez en su primer dictamen sobre el caso.
Figueredo, que arribó a Uruguay extraditado desde Suiza el jueves, pasa la Navidad en prisión luego de que la jueza Adriana de los Santos hiciera lugar el pedido de Gómez de que el exdirectivo sea enjuiciado y atraviese ese proceso en reclusión.
Según el fiscal, de las declaraciones de Figueredo el jueves se desprende "que desde la época que asumió como miembro del Comité Ejecutivo de la Conmebol, recibía importantes sumas de dinero, en función de estratagemas que urdían diversos integrantes de la citada Confederación, con la finalidad (...) de mantener un status quo de una aviesa forma de corrupción".
"De esa forma, entre otras cosas evitaba el llamado a oferentes y/o nuevos contratantes para la comercialización de los derechos de televisación de los distintos torneos organizados en el ámbito de la Confederación", señala el texto difundido en la página web de la fiscalía.
"Expresamente reconoce que tal modo de obrar traducía un perjuicio a clubes y a jugadores profesionales, en el caso de Uruguay, menguándose notoriamente los dineros que debían percibir", señala el fiscal, que recibió una denuncia el 24 de diciembre de 2013 presentada por clubes locales y la Mutual (sindicato) de Jugadores Profesionales contra varios dirigentes, entre ellos Figueredo, por esta cuestión.