Jorge Sampaoli ya no es el director técnico de la Selección Argentina, algo que sucedió por decantación pero que se estaba prolongando más de la cuenta. La salida del casildense se acordó en una suma mucho menor a la que se debía pagar si lo despedían, aunque un poco más alta a la que debían abonar la AFA si se esperaba hasta la Copa América del año que viene. El arreglo fue en dos millones de dólares, y para que se concrete, sólo falta la firma.
El Presidente de la Casa Madre, Claudio Tapia, disparó sin vueltas al abogado de Sampaoli la pregunta que dio inicio a la salida del DT: "¿Cuánto quiere para irse?", y la respuesta conformó a las partes para concluir la era del santafesino en la Albiceleste, más allá de que Chiqui había declarado que el conductor del representativo nacional todavía tenía contrato y lo esperaba ver dirigiendo el Sub 20 de L'Alcúdia. "Los hombres de bien cumplen su palabra", había dicho el mandamás de la máxima entidad del fútbol argentino, paro tantas idas y vueltas terminaron cansando a los dirigentes y no hubo manera de sostener lo insostenible.
Si al volver del Mundial, donde se dejó una muy pobre imagen desde todo punto de vista, lo echaban de inmediatamente, la suma que debía abonar la AFA superaba los ocho millones de dólares. Si el Zurdo permanecía hasta la Copa América 2019, la cláusula bajaba a un millón de dólares, lo que en definitiva, analizando esos números, que el arreglo sea por USD 2.000.000 no parece mal negocio para Tapia, Angelici y compañía.
En consecuencia, el destino del Pelado está sellado, y el técnico vive sus últimas horas al frente del Seleccionado Argentino.