Este viernes la Asociación Bahiense de Básquetbol informó que murió Jorge "Yuyo" Ginóbili, padre de Manu. El hombre que fue clave en el desarrollo del baloncesto en la ciudad bonaerense hacía tiempo estaba atravesando un delicado momento de salud que le había impedido viajar a los Estados Unidos en septiembre pasado, cuando la ex estrella de San Antonio Spurs ingresó al Salón de la Fama de la NBA
"Lamentamos profundamente el fallecimiento de Jorge "Yuyo" Ginóbili. Referente ineludible de Bahiense del Norte. Piedra angular de su creación como institución, jugador, DT, dirigente y amigo. Nuestro sentido pésame a su familia, amigos y allegados. Q.E.P.D", fue el mensaje de la ABB en Twitter que de inmediato se plagó de mensajes de amor hacia él.
En su discurso al ingresar al Salón de la Fama de la NBA, Manu se había quebrado al mencionarlo: "Papá, como me hubiese gustado que estuvieras acá, que puedas entender lo que está pasando hoy. Mi primer fiel y más grande seguidor, te extraño mucho viejito, te extraño...", le dijo a Yuyo, su padre.
Jorge Ginóbili es la razón por la cual Manu se apasionó por el básquet, pese a que curiosamente él no creía que pudiese llegar lejos en sus inicios. Así quedó claro en el documental La Generación Dorada, en la que se ve en un viejo video casero a Yuyo comentando que su hijo menor no contaba con la misma habilidad de Leandro, el mayor, quien parecía ser el elegido para llegar hasta la selección. Pero, la competencia con sus hermanos y los valores inculcados por su padre llevaron al más pequeño a transformarse en leyenda.
Jugador de Deportivo Norte y primer presidente de Bahiense del Norte cuando se fusionó con Bahiense Juniors, en 1975, el padre es el resumen del fanatismo por este deporte en la Capital del Básquet. En una entrevista al sitio BasquetPlus en 2018, había revelado cuál fue el torneo en el que mejor vio a su hijo: "Uno de los campeonatos más espectaculares que jugó Manu fue el Mundial 2002 de Estados Unidos, en el que lamentablemente no pudo estar en la final".
"En la semifinal se esguinzó y no pudo estar pleno en la final. En ese momento Manu empezaba a estar en su plenitud. Después, las finales de la Euroliga en Italia fueron espectaculares, ni que hablar la NBA. Lo único que no viví fue el Juego Olímpico de Atenas, que lo vi por televisión, pero realmente fue impresionante, te llevaba a un estado de gran emoción. Cuando cantaron el himno, levantaron la bandera y estaba todo el equipo formado, fue un momento emocionante", había expresado con orgullo.
En aquella entrevista, realizada después de que el ex jugador de los Spurs anunciara su retiro, le agradeció a Manu por la felicidad que le hizo sentir todos esos años de carrera: "Le diría que nos hizo vivir 20 años de gloria, de sensaciones espectaculares y de unos resultados deportivos por ahora inigualables. Ojalá pronto llegue gente que reemplace a la Generación Dorada. Como persona, ha demostrado con los chicos, con sus amistades, con toda la gente que lo conoce... es una satisfacción verlo realizado".