"Daniel tuvo ofrecimientos y yo personalmente hablé con varios equipos de acá y del exterior, y hasta con dos seleccionados también. Pero tenemos que reunir varias cosas importantes para que él vuelva, aunque el deseo de entrenar otra vez está latente", le explicó a TyC Sports el mencionado Soto.
"Por eso con cada dirigente de un club que me siento a charlar le transmito las ganas que él tiene de volver al fútbol, porque es muy injusto que un grande del fútbol mundial como Daniel esté afuera", consideró Soto.
Y luego precisó que habló "directamente con los presidentes de cuatro clubes de primera división del fútbol argentino. Y en uno existía una posibilidad concreta de que asumiera, pero Daniel prefirió no hacerlo inmediatamente, porque quiere estar convencido de que es la institución indicada para su regreso".
La versión de una chance de volver en Unión había corrido fuerte hoy, pero luego se terminó desvaneciendo.
Passarella, de 68 años, tuvo su último contacto con el mundo del fútbol en 2013, cuando fue presidente de River Plate en el marco de un proceso complicado que terminó con la pérdida de categoría del equipo de Núñez por única vez en su historia.
En su currículum como entrenador figura River al comienzo y al final de su carrera, junto a los seleccionados de Argentina y Uruguay y, en el exterior, los clubes Corinthians, de Brasil; Monterrey, de México y Parma, de Italia.